El informe de Degussa revela un panorama económico lleno de incertidumbre y expectativas cautelosas para este año. Con preocupaciones sobre los tipos de interés, mercados crediticios y el crecimiento económico, el oro emerge como un refugio potencial en medio de la volatilidad, respaldado por movimientos de bancos centrales y señales de una posible transformación monetaria a nivel global.
Los precios del petróleo suben y se encaminan a cerrar la primera semana del año con ganancias después de que las tensiones en Oriente Medio hayan dejado en un segundo plano los síntomas de debilitamiento de la demanda estadounidense.
Tras un 2023 de descensos, los precios del petróleo han arrancado el año al alza ante la delicada situación en el Mar Rojo. Pero, ¿qué se puede esperar para este 2024? Más allá de las tensiones geopolíticas, siempre muy difíciles de concretar, esto es lo que esperan los analistas para el año que acaba de arrancar.
En un contexto económico marcado por tensiones geopolíticas, crecientes desequilibrios y desafíos financieros, el informe mensual sobre el Oro elaborado por Degussa para diciembre de 2023 revela una perspectiva intrigante. Este análisis detallado ofrece luces sobre la dinámica entre el oro y los mercados de valores, señalando una posible tendencia y resiliencia del metal dorado en tiempos de incertidumbre económica global.
En el contexto de Basilea III y la redefinición del oro como activo clave, su relevancia como refugio financiero se afianza. Con un incremento constante desde la crisis del 2007-2012, el oro emerge como un activo líquido y de alta calidad, reconocido incluso bajo los estándares regulatorios más estrictos. ¿Qué papel desempeña en el nuevo panorama financiero y cuál es su relevancia en medio de la incertidumbre actual?
En un mundo de volatilidad financiera y constantes cambios económicos, el oro emerge como un refugio atemporal y sólido para los inversores. Con una historia de poder adquisitivo inigualable, resistencia a la inflación y un atractivo como diversificación, este metal precioso sigue siendo una opción atractiva. Descubre por qué invertir en oro puede ser la clave para asegurar tu futuro financiero.
Los precios del oro han llegado a superar este lunes los 2.100 dólares la onza, superando sus máximos anteriores alcanzados en agosto de 2020 debido a las crecientes expectativas de recortes de tipos en EEUU. Un dólar estadounidense más débil y menores rendimientos de los bonos del Tesoro, junto con una mayor incertidumbre geopolítica, están llevando a los inversores a impulsar las compras del metal amarillo.
El oro alcanza un hito clave superando los 2000 dólares por onza, marcando máximos desde mayo. Impulsado por la debilidad del dólar y la incertidumbre económica, este metal precioso se afianza como un refugio para inversores en un año desafiante.
Un dólar débil ante las expectativas de que la Fed ya ha terminado de subir los tipos de interés han dado combustible al oro para volver a superar los 2.000 dólares la onza, en máximos de seis meses. El metal amarillo se la juega con los datos de inflación en EEUU que se conocerán esta semana, pero todo apunta a que podría seguir subiendo.
La OPEP+, organización que agrupa a la OPEP y otros productores como Rusia, sacudió ayer al mercado del petróleo al retrasar hasta el 30 de noviembre su reunión, prevista inicialmente para este fin de semana. Si bien no dio una razón oficial para este retraso, todo apunta a tensiones dentro de la alianza petrolera.