Los fondos de inversión son uno de los vehículos favoritos por los inversores para canalizar sus ahorros en todo el mundo.
Según los datos de Inverco (Asociación de Instituciones de Inversión Coletiva y Fondos de Pensiones), a finales de 2016 en España los fondos de inversión tenían un volumen de más de 230.000 millones de euros.
Aunque en nuestro país aún queda mucho camino por recorrer hasta situarnos en el nivel de ahorro de largo plazo de nuestros vecinos, es cierto que en la actualidad existen más de 8,4 millones de personas que ponen su dinero en este tipo de productos.
Entrar en el mundo de los fondos de inversión es hacerlo en todo un universo, tan complejo como dispar. Podemos clasificar estos vehículos por el activo en el que invierten. Pueden destinar su patrimonio a renta fija (bonos), renta variable (bolsa), monetarios (parecidos al efectivo), mixtos (que incluyen renta fija y renta variable)…. Los que invierten en un sector específico, o en un tipo de empresa, que solo compran empresas que reparten dividendo, o bonos de alto riesgo.
Podría decirse que prácticamente existe un fondo para cada uno de los perfiles de inversor, más arriesgado, más conservador, con la visión puesta en el largo plazo…
La teoría dice que el inversor en España tiene un corte poco dado a los riesgos y en nuestro país existe mucho fondo mixto y mucho fondo de renta fija.
En los últimos años, además, existe una nueva controversia en el mercado de los fondos de inversión, la que implica a los de gestión pasiva –los que simplemente replican a un índice- y aquellos que se llaman de gestión activa. Estos últimos –en teoría- se gestionan de una forma muy diferente y el gestor responsable debe establecer claramente cuáles son los parámetros de selección de los activos que incluye en este vehículo.
En esta sección nos dedicamos a seguir la actualidad tanto la actualidad del mercado de los fondos de inversión, así como a contar las especificidades de muchos de estos vehículos.