Es una grata sorpresa que los datos reales acompañen a los de confianza, en una clara anticipación de lo que puede ser uno de los mejores trimestres. Y ello a pesar del escenario de elevada inflación.
En estos momentos, podemos comprar a niveles bajos tomando posiciones en los próximos meses, aprovechando las caídas significativas para construir carteras y posicionarse de cara a fin de año.
A estos niveles vemos oportunidades de arbitraje: debemos ponernos cortos en Ibex y largos en los sectores con mayor potencial como pueden ser el sector financiero; por otro lado, Repsol es una opción barata en el sector petrolero, y, finalmente, son interesantes los valores que han sufrido una corrección severa como pueden ser Ferrovial y FCC.
Para verano mantenemos la tendencia lateral entre los 11.200 y los 11.600 puntos del Ibex, con mayor volatilidad y menor volumen de negocio, pero somos optimistas de cara a la segunda mitad del año. Con ello, debemos mantener posiciones defensivas en valores como Telefónica o Enagas.
En términos de valoración la bolsa española está barata, pero en el corto plazo no encontramos ningún catalizador que la vaya a mover. El análisis técnico nos indica que hay ganas, que hay fortaleza y el mercado está cerca de sus primeras resistencias notables. Estando barata y siendo la Renta variable nuestro escenario favorito, el activo de Renta Variable en general y el español en particular, tiene recorrido.
Joan Cabrero.
analista y asesor financiero de Bolságora
Momento de tradding alcista en que debemos establecer soportes más que barreras. La última se sitúa claramente, para el corto plazo, en los 11.470 puntos, el mínimo de las dos últimas jornadas. Si se pierde, la corrección comenzará y la mejor opción será reducir o vender.
Iberia es un valor delicado que puede constituir una gran inversión a medio plazo pero, a corto plazo, la huelga puede costar entre 30 y 35 millones de euros y puede, además, perjudicar a la compañía ya que es posible que los clientes se desvían hacia la competencia y luego será complicado recuperarlos. Con esto, la cotización de la compañía evolucionará muy lentamente.
En los niveles actuales, la prudencia debe ser la nota dominante. Tras las fuertes subidas hay que evitar la entrada en el selectivo, y sólo se deben aprovechar los recortes para tomar posiciones en los valores mayor capacidad de revalorización. Todo ello teniendo en cuenta que el mercado seguirá volátil: los movimientos bruscos no han acabado.
La bolsa estará muy pendiente de los movimientos de las petroleras, precisamente hoy que han salido unos datos relativos a la venta al por menor que reflejan unas ventas más bajas de lo esperado.