2025 ha sido un año más que positivo en activos de riesgo, como la renta variable, las materias primas y algunas temáticas. Cuando gran parte del mercado sigue mirando al riesgo de corrección, hay activos que seguirán brillando el próximo ejercicio (y más allá). Aquí solo algunos de ellos.
Cuando todo está en máximos, el miedo puede hacer que nos asustemos con las inversiones. Pero no tan rápido, no es necesario entrar en pánico. Puede que sea una oportunidad.
Muchas veces pensamos en los países nórdicos como fríos lugares de gente disciplinada. Y, salvando mitos, es bastante cierto. Por eso algunas veces parecen aburridos, lo cual es oro puro cuando hablamos de algunos activos financieros, especialmente con la renta fija high yield.
Hoy he tenido la suerte de estar con Javier García, Managing Director en BlackRock España, que nos ha contado las perspectivas de la casa para este 2026 en el que ya estamos casi inmersos.
Los teóricos de la escuela austriaca de economía han visto siempre un símil muy útil de la expansión crediticia en la fiesta y la borrachera. De hecho, suelen explicar que el problema no son las recesiones, sino los ciclos expansivos previos que no tienen respaldo de ahorro. Esto lo vemos en los mercados financieros con la M2 y las subidas de las bolsas.
Las métricas on-chain de Solana han revelado que los validadores acusan una fuerte caída en los últimos tres años, pasando de 2.500 a 800. Mientras se observan señales de acumulación.
La fragmentación global, la debilidad del dólar y el auge de los emergentes obligan a replantear la estrategia de inversión. Desde Fidelity aconsejan abrir el foco a nuevas monedas, reducir la dependencia de EE. UU. y buscar oportunidades en Asia.
Estamos viendo cómo las grandes compañías del S&P 500 (en términos generales, al menos) siguen liderando el crecimiento de beneficios y rentabilidades, en detrimento de las pequeñas, que parecen no remontar.
Nerea Seijas.
Analista independiente enfocada en el análisis geopolítico
A pesar de las miles de sanciones impuestas al Kremlin durante los últimos años, su economía ha sido capaz de superar las previsiones. Ahora, la situación económica parece más complicada y quizás esta sea la clave para sentar a Vladimir Putin a negociar la paz.
Hay gráficas que cualquier inversor debería conocer al dedillo. Quizá no de memoria, pero sí saber de pé a pá su interpretación. Que existen caídas cada año y que no pasa nada, es una de ellas.