Mal comienzo de la semana en Europa con los ojos puestos en dos eventos importantes, el dato de creación de empleo de Estados Unidos el viernes y la reunión del BCE del jueves. El Ibex 35 ha sido el mejor de todos porque el daño bancario ha estado centrado en Alemania con esa ampliación de capital de Deutsche Bank y además el diferencial ha girado un poco dándonos algo de apoyo.
Se espera una apertura ligeramente alcista en Europa y más alcista en el Ibex por los bancos.
La situación sigue siendo parecida a la de ayer. Wall Street pletórico ante la fe ciega en las promesas de Trump, pese a que no dé ni el más mínimo dato sobre sus pretendidas grandes reformas, ni de donde va a sacar el dinero, ni sobre todo haya dado ningún paso legislativo al respecto, por lo que como pronto, hasta el año que viene no se va a ver nada.
Y además, no todo, por fin, es Trump. Hay otro factor que está pesando mucho. El hecho de que se han disparado, vía futuros federales los descuentos de subida de tipos en marzo. Empezábamos la semana con poco más del 30% de posibilidades y en este momento, tras nuevas declaraciones de ayer por la noche se descuenta al 84%. En concreto el gobernador Brainard, y el presidente de la FED de Dallas, Kaplan volvieron a decir que quieren subidas de tipos ya.
Este movimiento, está causando que los bancos se disparen, ya que si hay subida de tipos se ampliará el margen de su negocio, y los bancos americanos contagian a los europeos. Además está haciendo daño a los bonos y causando que el dólar se mantenga fuerte. La reunión de la FED será en los días 14 y 15 de marzo.
La libra con problemas ante los muchos comentarios de que están muy cerca de activar el artículo 50 para pedir ya su salida.
Hoy tendremos el IPC de la zona euro, que tal y como están las cosas, tensas con los tipos podría dar movimiento.
Desde el punto de vista técnico los grandes índices europeos han roto resistencias de los laterales desde primeros de año.
El Nikkei ha subido 0,88%.
Fuertes alzas en Europa y en Wall Street, por la fe ciega en que Trump, cumplirá con su plan de infraestructuras y con la reforma fiscal, tras su intervención de ayer en el Congreso, a pesar de que no dio ni el más mínimo detalle de cómo lo piensa hacer. Además clave la subida de los bancos, ya que se han disparado las posibilidades de subida de tipos en marzo, repentinamente tras declaraciones de varios miembros de la FED. Esto da esperanzas de mayor margen a los bancos, mientras que en Europa ha habido subida de la inflación en Alemania, lo que hace pensar en que apretarán las clavijas a Draghi, y eso es bueno para los bancos. Se rompen resistencias importantes en Europa al cierre.
Subidas moderadas en toda Europa, en otra jornada de transición con los operadores poco dispuestos a mover ficha ante lo que tenga que decir Trump a las 3 de la madrugada. El Ibex ha subido más que los demás gracias a los bancos y a lluvia de resultados que ha tenido hoy. El dólar cayendo contra la lógica contra el yen.
El beneficio de la papelera se redujo un 22,4% hasta 38,7 millones de euros durante el pasado ejercicio por la caída de los precios de la energía y el precio de la celulosa.
Se espera apertura algo alcista en Europa.
Jrnada de pocos cambios, ya que los operadores no querían moverse en ninguna dirección hasta ver que pasa mañana con la comparecencia de Trump ante Congreso y Senado, y donde se supone que debería verse obligado a romper su silencio sobre la política económica. Por otro lado, es destacable que se van diluyendo los miedos en Francia respecto a una victoria de Le Pen, que se da ya casi por imposible, lo cual tranquiliza al mercado.
Se espera apertura moderadamente al alza
Durante la mañana en Europa intentado sostenerse en positivo gracias a algunos resultados empresariales muy positivos como los de Telefónica y además una cierta relajación de los diferenciales en Francia tras aumentar las probabilidades de que Le Pen no pueda ganar la segunda ronda de las elecciones francesas. Sin embargo, unas declaraciones del secretario del tesoro norteamericano diciendo que las mejoras en el crecimiento por la bajada de impuestos podrían no verse hasta 2018, nos ha dejado demasiado tiempo en manos de los efectos negativos del ciclo de subida de tipos de la Reserva Federal.