Con las tensiones entre China y Estados Unidos contrarrestando el optimismo generado por el repunte de Wall Street impulsado por las tecnológicas, los futuros del Ibex 35 bajan en la preapertura de la sesión del martes, alejando al selectivo de los 7.100 puntos que ya perdió en la jornada de ayer.
Tras un primer semestre convulso y marcado por la volatilidad en los mercados a causa de la pandemia de coronavirus, analizamos las previsiones de los analistas para los próximos meses en la bolsa española, así como las principales oportunidades que deja la crisis.
El Ibex 35 finaliza el lunes con una caída del 0,90% hasta los 7.090 puntos, en una jornada sin grandes noticias ni movimientos, y pendiente de lo que ocurra en los próximos días a nivel macroeconómico y entre republicanos y demócratas en Estados Unidos.
Es el decimotercer peor valor del Ibex en lo que va de año aunque su entrada en el indicador se produjo hace apenas dos meses. Una farmacéutica, compañera en el sector de Grifols en el selectivo, que ajena al Covid-19 presenta fuertes pérdidas en el año de la pandemia y a la que no le está sentando bien la digestión de estar entre los grandes del mercado.
El Ibex 35 intenta girarse al alza, tras una apertura con caídas, en una jornada típica de verano. Con escasas referencias tanto macroeconómicas como empresariales, el selectivo español hace un intento por conservar los 7.100 puntos.
La compañía de medios de comunicación y editorial sigue enfrascada en sus problemas tanto internos como externos, en su accionariado y en especial en Portugal con el grupo Cofina. Todo ello aleja a los inversores que colocan al grupo media en el tercero por la cola dentro de la bolsa española, sin solución de continuidad.
El último mes está mostrando un cambio de sesgo entre los valores que más impulso están tomando. Los rumores de fusiones y las ventajas de las renovables cargan las pilas de los inversores mientras que un viejo conocido, el valor más alcista del año y el único minero en nuestro mercado, se cuela también en la lista como uno de los habituales.
El sector financiero sigue padeciendo las consecuencias del efecto pandemia. Y no solo eso, sino que ante la persistencia de la crisis, que en principio se alargará más de los previsto, los efectos secundarios de la misma crearán una segunda fase de impacto para los bancos. Con esta perspectiva ¿ Son las fusiones la solución? O por el contrario ¿Se trata solo de garantizar la pervivencia de muchas de estas entidades sin que se vislumbre claramente su futuro?.
La entidad financiera que preside Carlos Torres Vila no levanta cabeza en el mercado ni tan siquiera a cuenta de las fusiones, como está ocurriendo con otras entidades. Con pérdidas en el último mes superiores al 20,4%, el verano está resultando una nueva pesadilla ya que su cotización rompe peligrosamente soportes en la última semana.
Los futuros del Ibex 35 bajan en la preapertura de la sesión del lunes, extendiendo el rojo que el selectivo español ya registró en la jornada del viernes. La mayoría de índices europeos apuntan al alza tras el cierre con subidas de las bolsas asiáticas.