Los principales índices estadounidenses esperan en color mixto la apertura del mercado, después de que ayer aguantaran estoicamente frente a las caídas de la renta variable europea. Además, los inversores prefieren decantarse por la prudencia a la espera de lo que se decida este fin de semana y el lunes con el rescate de Grecia. Los futuros del Dow Jones suben un 0,25% hasta los 12.902 puntos y S&P 500 un 0,14%, mientras que los del Nasdaq recortan un 0,10%.
CaixaBank ha emitido 1.445,9 millones de euros en bonos subordinados y necesariamente convertibles en acciones con vencimiento el próximo 30 de junio de 2013 y a un interés del 6,5%.
La morosidad de los préstamos concedido por bancos, cajas, cooperativas y establecimientos financieros de crédito acabó 2011 en el 7,61%, nivel que no alcanzaba desde hace diecisiete años.
Tras la debacle bursátil del jueves, los bancos vuelven a resurgir de sus cenizas, especialmente los dos grandes quem aunque fueron los menos penalizados de su grupo, dejan atrás sus soportes importantes.
Ayer se anunció un acuerdo, prácticamente seguro, el próximo lunes sobre Grecia. Un acuerdo ¿suficiente? Para impedir más caídas hoy sí, para evitar la volatilidad "no lo creo", afirma José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citigroup en España.
La prima de riesgo española se relaja hoy hasta los 335 puntos básicos en la apertura. De este modo, la rentabilidad del bono español a diez años - cuyo diferencial con el alemán mide la prima de riesgo- cotiza en el 5.33%, cinco décimas por encima del último precio registrado ayer.
Vuelven las compras al viejo continente tras una jornada marcada por el desplome de la banca. El anuncio por parte del gobierno griego sobre la llegada a un acuerdo con sus acreedores internacionales y que sería aprobado en la reunión del eurogrupo del lunes da alas al mercado y, sobre todo, al sector financiero. Bankia trata de recuperar el terreno perdido. El par euro/dólar se mantiene en el 1,31, mientras que el spread de deuda español se contiene y abre a la baja en los 330 puntos básicos.
Atenas asegura haber llegado finalmente a un punto de encuentro con sus acreedores internacionales para el ahorro de 325 millones de euros y es la llave para desbloquear el segundo tramo del rescate heleno por valor de 130.000 millones de euros.