Explicar el momento económico que estamos viviendo no es sencillo, más bien todo lo contrario. Pero si alguna palabra puede definir el recrudecimiento de la crisis, ésta es desconfianza.
Se confirma el retroceso del patrimonio de los fondos de inversión nacionales durante julio por un valor de 2.233 millones de euros, un 1,57 por ciento respecto al cierre de junio pasado, según VDOS Stochastics.
En momentos de pánico como el actual, “son ventas de pánico que llevan a valoraciones atractivas que, si se compra con visión de largo plazo, podría presentar oportunidades interesantes”. Es el momento de los cazadores de gangas.
Apenas una hora después de una apertura en negativo, el Ibex 35 comienza a dudar. Pérdidas, subidas y nuevamente pérdidas que llevan al selectivo español a tantear los 8.700 puntos. ¿A favor de la subida? El comportamiento de los grandes valores.
El Banco de España calcula que la economía española creció un 0.2% en el segundo trimestre - en tasa intertrimestral - y un 0.7% en términos interanuales, según el último boletín de la entidad. Una desaceleración que se habría producido por una caída en la demanda más pronunciada que el trimestre anterior.
La producción industrial cayó en junio un 2%, según los datos publicados por el INE.
Siguen los números rojos…y el batacazo en la renta variable española. El Ibex 35 cede un 2.14% y marca en los 8.509 puntos su primer movimiento. Una caída que encuentra en valores como Sacyr Vallehermoso y Gamesa a sus mayores aliados además de una prima de riesgo que vuelve a colocarse por encima de los 400 puntos básicos. En el mercado de divisas, el euro sube frente al dólar hasta las 1.41 unidades.
La prima de riesgo española continúa asumiendo su papel alcista. En preapertura, se dispara hasta los 414 puntos básicos gracias a la fuerte caída en la rentabilidad del bono alemán a 10 años.
A pesar de que el entorno actual no favorece al sector de infraestructuras, Morgan Stanley ve oportunidades en valores como Ferrovial. Un valor en el que inicia la cobertura con un objetivo de 10.4 euros, un 28% por encima de los precios actuales.
Caídas generalizadas en la renta variable. A las pérdidas de más del 3.8% con las que cerró el Ibex 35 le siguieron fuertes penalizaciones tanto en Wall Street como en Asia al cierre de la sesión.