El presidente del Grupo Santander, Emilio Botín, aseguró hoy que la crisis de liquidez que afecta actualmente a los mercados financieros de todo el mundo "se resolverá pronto, porque no responde a razones fundamentales"."Hemos visto en las últimas semanas un claro ajuste de la situación financiera internacional, que ha originado tensiones de liquidez, ha elevado el coste del riesgo y ha penalizado los excesos en el uso de algunos instrumentos financieros en materia de crédito" para mostrar a continuación su confianza en que la situación se resolverá en breve. Declaraciones de Emilio Botín durante la clausura del Día del Inversor que la entidad celebró en la Ciudad Financiera de Boadilla del Monte en Madrid. Botín también aprovechó para insistir en la previsión de beneficio ordinario para el presente ejercicio, que ya adelantó el pasado junio en la Junta de Accionistas y que situó en 8.000 millones de euros, ayudado, entre otras razones, por la importancia que tiene para el Grupo la actividad comercial, por su amplia red de sucursales y por el "bajo perfil de riesgo" de sus negocios."El Santander está hoy en el mejor momento de su historia y estoy convencido de que continuará en los próximos años, cualesquiera que sean las circunstancias de mercado, en una trayectoria sostenida de excelencia y de creación de valor para sus accionistas", un objetivo este último que situó "en el centro de su cultura corporativa".Botín se mostró convencido de que el Grupo tiene "las capacidades necesarias" para lograr un incremento del beneficio por acción un 5% superior al de sus competidores en los próximos dos años.El Santander no quiere ser un banco "más grande, sino un banco mejor", más rentable y con mejores perspectivas de crecimiento y creación de valor.Por eso mantendrá su estrategia de adquirir entidades que hagan banca minorista, en las que controle la gestión y también que la compra permita al grupo alcanzar crecimientos importantes y sostenibles a medio plazo.Citó como ejemplo la compra de Abbey y la oferta conjunta que ha presentado con Fortis Bank y Royal Bank of Scotland por ABN Amro, de la que dio que "encaja perfectamente en esta estrategia"La entidad aseguró hoy a sus accionistas que cuenta con "un perfil de riesgo medio-bajo y predecible", y señaló que el 62% de su balance corresponde a créditos a clientes, mientras que, de este total, un 83% es en financiación a particulares y pymes (banca comercial) y un 17% a crédito corporativo.El presidente de la Comisión Delegada de Riesgos, Matías Rodríguez Inciarte, destacó que la actividad en las nuevas formas de financiación mayorista, en operaciones de alto riesgo o la actividad fuera de nuestros mercados y clientes objetivos "es muy marginal".Además, "dentro del mercado inmobiliario español, hemos actuado siempre con prudencia y limitando deliberadamente nuestra cuota de mercado en los segmentos de mayor riesgo", al tiempo que recordó que Santander cuenta con unas provisiones genéricas de 6.000 millones.Su director financiero, José Antonio Alvarez, indicó que las ultimas semanas se ha visto "un ajuste en la situación financiera internacional" y agregó que en el nuevo ciclo se producirán "mayores diferencias entre los bancos buenos y los malos".Señaló la disciplina de capital como seña de identidad del banco, que se concreta en la venta de préstamos para liberar capital, minimizar ampliaciones de capital, la liberación de recursos con la venta de activos no estratégicos y la remuneración a los accionistas con un dividendo equivalente al 50% de su beneficio ordinario.Además, el Santander está convencido de que su
área de banca mayorista y de mercados verá crecer sus ingresos en un porcentaje superior al 20% anual entre 2006 y 2009 y calcula que será capaz de mantener los ratios de eficiencia en el entorno del 30%.Santander Seguros prevé que sus ingresos aumenten a tasas del 20% hasta 2009 y que éstos se apoyen en el medio plazo en la bancarización de Iberoamérica, mientras que Banca Privada espera que el volumen de activos bajo gestión crezca un 18% al año hasta 2009.En tarjetas, el Santander quiere "ser el especialista en medios de pago mejor integrado en una banca comercial en el mundo".Actualmente cuenta con 16 millones de tarjetas de crédito, seis millones de tarjetas de empresa, 32 millones de tarjetas de débito y 22.800 cajeros automáticos y espera duplicar al cierre de 2009 los ingresos obtenidos con éstas en 2006, ejercicio en el que llegaron a 1.657 millones de euros.