Rara vez los mercados han sufrido tanto volatilidad como en octubre sin que existiese un acontecimiento importante que la desencadenase. Y sin embargo, se desató la tormenta, alimentando grandes cantidades de malas noticias para las economías europeas, una postura bastante alarmista sobre los riesgos económicos adoptada por el FMI y la apreciación del dólar.
Septiembre terminó con una situación de calma en los principales mercados: el S&P 500 prácticamente no ha experimentado cambios, el Eurostoxx 50 ha subido ligeramente y se han producido pocas tensiones en el mercado norteamericano de bonos.
Janet Yellen asumió la presidencia de la Reserva Federal en febrero, pero no se ha producido todavía una inflexión en la política monetaria. Vicepresidenta antes de que Bernanke dejase su cargo, ha continuado con la reducción gradual de la compra de activos que empezó en 2013 al mismo tiempo que ha mantenido los tipos de interés a corto plazo a niveles muy bajos.
La característica principal en las economías de los países desarrollados es una política monetaria históricamente acomodaticia.
Debido a un mejor momentum y visibilidad en Estados Unidos, la Reserva Federal ha decidido empezar a reducir sus compras de bonos a principios de 2014. Sin embargo, una inflación moderada y la caída gradual en las tasa de desempleo ayudará a Janet Yellen a mantener una política monetaria acomodaticia y a dilatar el comienzo de las subidas de tipos rectores hasta el final de 2015.
Preferimos la renta variable frente a la liquidez por las siguientes razones: la recuperación económica se está volviendo más sincrónica; los bancos centrales, incluida la Fed, mantendrán una política acomodaticia, la valoraciones de la renta variable con respecto a los bonos son más atractivas, el ampliamente esperado ciclo global en M&A parece que al fin está teniendo lugar.
En Estados Unidos, a pesar del impacto negativo del presupuesto federal en el gasto gubernamental, la aceleración en la construcción de viviendas – tendencia todavía deprimida en comparación con la media histórica, pero que está mejorando rápido- constituye una confirmación de que el ciclo económico va bien y de que verdad se está recuperando.
Benjamin Melman, es director de Asignación de Activos y de deuda soberana y gestor de estrategias de retorno absoluto (Fondos Quadrim) en Edmond de Rothschild AM . El fondo Quadrim 8 está basado en una estrategia triple que le ha permitido cosechar muy buenas rentabilidades desde su lanzamiento en 2009. De este forma, en mercados volátiles favorece las estrategias técnicas, con un horizonte a corto plazo, y un elevado potencial de rentabilidad en mercados inciertos. Las estrategias macro, por su parte, tiene un horizonte a medio plazo, son especialmente adecuadas para capturar los cambios en las tendencias de la economía y constituyen una fuente de rentabilidad en todas las condiciones de mercado. Por último, las estrategias de “retorno”, con un horizonte a largo plazo, se intensifican en momentos de estabilidad en los mercados.
Indudablemente, las decisiones de los bancos centrales han ayudado a los mercados a superar una situación económica que sigue siendo difícil.
El segundo semestre del año vendrá marcado a nivel globla por un crecimiento moderado en aumento pero, con un menor número de factores irracionales