Apertura al alza de Wall Street en la sesión de este martes, con el Dow Jones recuperando sensaciones tras el tropezón de ayer y el S&P 500 buscando su tercer día en positivo. No obstante, se mantiene una dosis de cautela a la espera de referencias del mercado laboral y pendientes también de las políticas del presidente electo, Donald Trump.
Satya Nadella, CEO de Microsoft, ha anunciado en un evento en India que promete invertir 3.000 millones de dólares para expandir sus capacidades de computación en la nube e inteligencia artificial en el mencionado país.
Andrew Boone, analista de JMP Securities, ha señalado que Meta podría alcanzar los 750 dólares gracias a la inteligencia artificial o IA.
¿En qué valores invertimos en 2025? Ahora la gran mayoría mira a EE.UU. al menos al inicio del presente ejercicio, con las subidas acumuladas en 2024 da cierto vértigo subirse a valores que han crecido de forma imponente. Pero si contamos con la recomendación de algunas de las grandes firmas americanas igual nos lo podemos pensar. Estos son algunos de sus 'top picks' o valores preferidos.
Los principales índices neoyorquinos abren en verde, continuando con la tendencia del viernes. El mercado espera ya las cifras de empleo que se irán publicando a lo largo de esta semana.
Warren Buffett, fundador de Berkshire Hathaway, tiene un test que realiza a toda empresa antes de decidir si invertir en o no. Pero ¿en qué consiste y cómo lo realiza?
Rivian ha anunciado que ha supera las previsiones de entregas de vehículos que tenía Wall Street para el cuarto trimestre 2024.
Alibaba ha reducido un 85% el precio de modelo de inteligencia artificial o IA de Lenguajes Grandes o LLM para hacer su servicio más competitivo y ante el incremento de la competencia.
Ponemos bajo los focos a los mejores valores de Wall Street durante el pasado 2024, con revalorizaciones que en algunos casos superaron con creces el 1.000%. ¿Podrán seguir teniendo cuerda para subir en 2025?
Apertura alcista de Wall Street, con los inversores intentando al menos frenar la sangría de un comienzo de año muy débil que ha echado por tierra las esperanzas de un rally de Santa Claus y frenado lo que podía haber sido el mejor comienzo anual del S&P 500 desde 2013. El buen dato de ISM manufacturero, apoya las subidas, aunque todavía no alcanza el grado de expansión.