La previsión de la ampliación de capital, en una franja temporal de uno a cinco años, obedece, según se ha planteado en una Junta de Accionistas, con continuas referencias a la caída de las ventas, al "empeoramiento generalizado" de las condiciones del sector inmobiliario y a la "inestabilidad" de los mercados financieros.Asimismo, se ha aprobado la facultar al Consejo, sin obligación de convocatoria extraordinaria de Junta de Accionistas, para emitir obligaciones u otro tipo de títulos de deuda convertibles en acciones de nueva emisión de la sociedad, por un importe máximo de 442.980.000 euros.Por otra parte, la Junta ha aprobado la ampliación del Consejo de Administración, que pasa de 11 a 15 consejeros, tras lo que se ratificó el nombramiento de cuatro nuevos componentes, tres de ellos designados por Fernando Martín, que amplia su representatividad, alcanzando seis consejeros.El presidente de Martinsa-Fadesa, Fernando Martín, ha admitido hoy que la inmobiliaria tendrá que "tomar medidas difíciles", que conllevarán "costes sociales elevados", que justificó con la necesidad de "garantizar" el futuro de la compañía en una difícil coyuntura.El presidente de Martinsa-Fadesa ha apelado al apoyo del accionista y al esfuerzo de los trabajadores y directivos "para superar este proceso difícil", que obligará a "adaptar la organización a una estructura más flexible y dinámica, para sentar las bases de la compañía a largo plazo".Martín ha cifrado en un 40% la caída de ventas de viviendas, en el primer trimestre del año, y avanzó "que no hay nada halagüeño para el segundo", por lo que reclamó a la Administración la implementación de medidas para abaratar del suelo y para la conversión de viviendas libres en protegidas y el fomento de alquiler, con opción a venta.Además, ha avanzado que los promotores presentarán una oferta de entre 500.000 y 600.000 viviendas para este ejercicio, cuando la demanda estimada es de 400.000, un cálculo, en su opinión, "bastante optimista".Previamente a la reunión, Fernando Martín se ha reunido con el Comité de Empresa en A Coruña, al que le informó de que la empresa tiene un compromiso con la Xunta, "que cumplirá al 100%", por el que en Galicia el proceso de regulación de empleo "no superará los 60 puestos de trabajo", de las 210 personas que quedan en la sede coruñesa.Fernando Martín les ha dicho que la compañía ahora tiene que "estrecharse" hasta que las condiciones de mercado sean más favorables y pueda volver a "expandirse".Además, fuentes de la compañía han confirmado que no habrá una mesa de negociación diferenciada para A Coruña, dentro del proceso de negociación previa al Expediente de Regulación de Empleo (ERE), ya que "las condiciones que se acuerden deben ser comunes para toda la plantilla", argumentaron desde la compañía.Hoy mismo ha sido enviado un escrito a las distintas delegaciones, informando de la constitución el próximo viernes de la mesa de negociación en Madrid, donde se negociará el plan de regulación, que pasará por prejubilaciones o bajas anticipadas, entre otras medidas contempladas habitualmente en los ERE.En estos momentos, la plantilla de Martinsa-Fadesa está formada por 850 personas.