En un comunicado, el G-14 indica que, a partir de ahora, cabe esperar una cierta recuperación en el inicio de nuevas promociones de vivienda, "siempre que la financiación vuelva a reactivarse", ya que, de no ser así, el ajuste del sector podría cobrarse 700.000 empleos y restar 1,5 puntos porcentuales a la tasa de crecimiento del PIB.Además, el G-14 señala de que la demanda prevista hasta 2015 será de más de tres millones de viviendas principales y de unas 700.000 secundarias, para lo que hará falta construir una media de 400.000 inmuebles anuales.Sin embargo, advierte que el ritmo de iniciación se ha reducido a la mitad en un año y medio. En esta situación, prosigue, "si esa demanda, ahora embalsada, no se atiende con suficiencia y aflora de golpe, podría ocasionar un desajuste de mercado".En este sentido, los datos del último Salón Inmobiliario de Madrid (SIMA 2008) dejan entrever la recuperación de una mayor confianza entre los compradores al haberse cerrado más operaciones de compra de las que se esperaban al comienzo del Salón.Por otro lado, las grandes inmobiliarias quisieron aclarar que, frente a las informaciones que apuntan a la posibilidad de que el Gobierno financie el sector ante la actual restricción del crédito, las inmobiliarias "no piden subvenciones de ningún tipo, sino la vuelta a los niveles de financiación necesarios y siempre a los precios que marque el mercado".