Wall Street inicia la jornada con indefinición, tras los récords del lunes de Dow Jones y S&P 500. Se mantiene la fortaleza, pero sin euforia ante la falta de catalizadores y con ciertas dudas en los valores tecnológicos.

“Aplanamiento sí, tendencia bajista no. Cada vez que se produce un retroceso, los inversores retoman posiciones a unas valoraciones más atractivas”, detallan desde el Departamento de Análisis de Bankinter. “Sin que haya grandes noticias o novedades, todo pasa por el hecho de que varios selectivos mundiales han tocado máximos en las últimas horas”, añade Daniel Pingarrón, de IG.

Así, como focos de atención, en ausencia de datos macro relevantes, encontramos las comparecencias de varios miembros de la Reserva Federal (Fed). Como ha sido su vicepresidente, Stanley Fischer, que se ha mostrado preocupado por la situación del sector inmobiliario.

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Por su parte, el presidente de la Fed de Boston, Eric Rosengren, ha advertido que los bajos tipos de interés plantean problemas para la estabilidad financiera que los bancos centrales y el sector privado deben tomar en serio. Escucharemos asimismo al de la Fed de Dallas, Robert Kaplan.

Con todo, los expertos de Bankinter creen que la autoridad monetaria norteamericana “se pronunció la semana pasada con bastante claridad sobre su política monetaria. Otro debate diferente es si el mercado se cree o no su mensaje”.

Si ampliamos el horizonte de inversión, desde Saxo Bank, creen que ahora mismo el mayor riesgo para los activos financieros es que el presidente norteamericano, Donald Trump, “fracase en su agenda económica y fiscal”. Asimismo, alertan contra la “baja volatilidad y la complacencia”, pero reconocen que “de darse una corrección, sería de corta duración”.

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Mientras, en el plano empresarial, destaca el buen comportamiento de Lennar, tras batir las expectativas del consenso con sus resultados del segundo trimestre fiscal; y el de Tesla, tras ser declarada ‘no culpable’ del fatal accidente ocurrido en mayo de 2016.

Finalmente, en otros mercados, el crudo se mantiene a la baja, en mínimos ya de siete meses, con el barril de Brent por debajo de los 46 de dólares y el de West Texas ligeramente sobre los 43, en medio de las preocupaciones por el avance de la producción de frackingy la incapacidad de la OPEP de reducir el exceso de oferta con sus recortes.

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