Los miembros de la OPEP+, que agrupa a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros productores como Rusia, llegaban el pasado domingo a un acuerdo para extender el recorte actual de producción de crudo, pactado en abril, un año más de lo previsto, hasta final de 2024, al tiempo que Arabia Saudí se comprometió a un ajuste adicional voluntario de un millón de barriles diarios a partir de julio. ¿El objetivo? Tensionar el precio del oro negro, que en los últimos doce meses ha descendido más de un 38%, mientras que en lo que llevamos de año cede un 8%.
Sin embargo (al menos por el momento) la medida parece estar fracasando en el intento. El petróleo Brent apenas subió un 1,4% en la jornada del lunes hasta los 77,2 dólares por barril, en la del martes por la mañana bajaba hasta los 76,33 dólares, y en la de ayer recuperaba de nuevo la cota de los 77 dólares por barril, una cifra que se mantiene muy cerca de los mínimos del último año y medio y hasta 20 dólares por debajo de los niveles previos al estallido de la guerra en Ucrania.
Las razones del fiasco son varias. En primer lugar, porque parte de este recorte no es real, ya que hay varios casos donde la cuota permitida se rebaja hasta la producción actual del país, que no se puede elevar más debido a sus problemas internos, como es el caso de Nigeria o Angola. En segundo lugar, porque hay otros países que no cumplen sus cuotas, como es el caso de la propia Rusia. Y, lo más importante, por las malas perspectivas de la demanda ante una ralentización de la economía global.
Proyecciones alcistas muy moderadas
El analista Pablo García, de Divacons Alphavalue, explica que, aunque más allá de Arabia Saudí, "el resto de la OPEP, de momento, no ha querido tocar los niveles de producción y lo descartan de aquí a final del año; sin embargo, no es tan obvio si tenemos en cuenta esos recortes voluntarios de la producción. Creo que la OPEP va a buscar niveles superiores a 80 dólares por barril, pero de momento no ha habido novedades y la colaboración con Rusia sigue siendo muy estrecha, pueden llegar en cualquier momento. Todo va a depender de la desaceleración económica, es decir, de si China se desacelera como se prevé a finales de este ejercicio y principios de 2024 y también del consumo de la Eurozona o Estados Unidos".
En cuanto a las previsiones en número de aquí a final de año, el pasado martes se publicaba un nuevo informe de la Perspectiva Energética a Corto Plazo (STEO) de la Administración de Información Energética (EIA) de Estados Unidos, en el que se indicaba que las restricciones en la oferta de la OPEP llevarán a una disminución de los inventarios de petróleo a nivel mundial en los próximos cinco trimestres. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta disminución será muy pequeña y el mercado se mantendrá equilibrado. Por esta razón, la EIA espera una estabilidad de precios, con una media de alrededor de 79 dólares estadounidenses este año y 83 dólares estadounidenses el próximo año para el Brent.
Por su parte, los analistas de Goldman Sachs estiman que la decisión de este pasado domingo podría representar un “alza moderada” para los mercados de petróleo. Esto impulsaría el valor del Brent hacia finales de año entre 1 y 9 dólares el barril, lo que aún lo situaría por debajo de los 90 dólares, pero sería suficiente para evitar el gran temor saudí, que es el de un barril por debajo de los 70 dólares que desequilibre toda su economía local.
Los más optimistas son los analistas de ANZ Group, que han reiterado su objetivo de 100 dólares para el barril de Brent a final de año y apuestan por un nuevo tramo alcista, señalando que Arabia Saudí y la OPEP+ apoyarán los precios en caso de que haya problemas.
Finalmente, los economistas de Société Générale analizaban ayer técnicamente el precio del Brent y sus próximos niveles a tener en cuenta. "A corto plazo, el Brent ha experimentado un rebote constante desde la semana pasada y ahora está desafiando la DMA de 50. Se está acercando a una línea de tendencia descendente de varios meses en 81$. Si el rebote en curso flaquea cerca de este nivel, podría recuperarse el impulso bajista. Una ruptura por debajo de 70$ confirmaría un tramo más de la tendencia bajista; los siguientes objetivos potenciales se sitúan en el mínimo de diciembre de 2021 de 65/63$ y en 57$".