Oriente Medio y norte de África. ¿Cómo ve usted el ciclo económico de estas regiones y la posible amenaza de una guerra comercial?

En términos generales cualquier tipo de guerra comercial resulta profundamente negativa para cualquier economía. Sin embargo, creemos que hay ciertas regiones que son inmunes a lo que está teniendo lugar a nivel mundial, puesto que creemos que los motores de su economía son internos, y no externos.

Una vez más, hemos visto que el comportamiento del mercado refleja la inmunidad en países como Arabia Saudí, que ha sido uno de los mercados que mejor se ha comportado últimamente este año. Resulta muy importante comprender la región de Oriente Medio y norte de África, lo que nos hace pensar que los motores de dichas economías son internos, sustentados en el gasto público, y la capacidad de invertir por parte de los gobiernos en sus economías internas, en vez de depender excesivamente de los lazos comerciales con otros países.

¿Qué opina sobre la situación de los precios del petróleo? ¿En qué nivel cree que se situará el crudo de aquí a finales de año?

Resulta difícil vaticinar en qué nivel se situarán los precios del petróleo. Sin embargo, tengo plena certeza de que a pesar de que Arabia Saudí es fuertemente dependiente de la exportación de petróleo, y esto condiciona en parte el presupuesto público, la dependencia de la nación o la economía del petróleo no es tan sensible a los precios del mismo, simplemente porque creemos que dichos gobiernos tienen suficientes reservas para continuar con sus planes de gasto público, y siempre y cuando la reservas puedan seguir cubriendo los déficits fiscales que tienen estos gobiernos, entonces proseguirá el gasto. Además, hay sectores estratégicos en los que está invirtiendo el gobierno, que les van ayudar a alcanzar los objetivos a largo plazo, ya sea la diversificación huyendo de la dependencia del petróleo, el cual es uno de los pilares sobre los que sustentan los gobiernos de Oriente Medio y norte de África, o aumentar la empleabilidad de la población más joven. Sí que es cierto que el petróleo tiene un impacto sobre los presupuestos públicos, sin embargo, la sostenibilidad del gasto público nos da cierta confianza y nos hace pensar que la dependencia de los precios del petróleo no es tan elevada.

¿Qué oportunidades de inversión ve usted en estos países y en qué tipo de compañías?

En términos generales creo que los mercados de Oriente Medio y norte de África, como otros muchos países emergentes, cuentan con muchos sectores con poca presencia inversora. Por ejemplo, el sector de aseguradoras de automoción. En Arabia Saudí, por ejemplo, la mitad de los conductores no cuentan con seguro del automóvil. Además cuando se le permita a las mujeres conducir esto duplicará la población de conductores en nuestra opinión. Desde ese punto de vista hay varios sectores con baja penetración. Los préstamos hipotecarios, expresado en porcentajes totales del PIB también cuentan con una baja penetración, representando menos del 1,5%. Las casas en propiedad, en países como Egipto son prácticamente inexistentes. Lo mismo sucede con los préstamos al consumo, que apenas rozan el 5% del mercado total, otro ejemplo de baja penetración. Desde este punto de vista sí que hay muchos mercados con poca penetración. Sin embargo, lo que resulta más interesante de la región de Oriente Medio y norte de África es que la brecha se ha ido cerrando gracias a ciertas iniciativas gubernamentales. Volviendo al ejemplo de Arabia Saudí, el hecho de que se permita a las mujeres conducir va ayudar mucho como revulsivo para los préstamos de automóvil. Las iniciativas encaminadas a alentar a que los conductores aseguren sus vehículos van a crear numerosas oportunidades para las aseguradoras de automóvil.

La mayor parte de los países se han visto penalizados a lo largo de este año, con la excepción de Israel y Arabia Saudí. ¿Cree usted que es que es un buen momento para que los inversores españoles inviertan en estos países?

Creo que la situación en los mercados es harto complicada. Arabia Saudí cuenta con muchas ventajas, lo que hace que sea un mercado muy interesante. El buen comportamiento a lo largo de este año es fruto de lo siguiente: por un lado Arabia Saudí ha estado muy aislada de los fenómenos que han tenido lugar a nivel internacional, y por otro lado se ha visto beneficiada de su inclusión en los índices MSCI y FTSE de economías emergentes, lo que ha atraído muchísimo interés en la región. Hasta el momento hemos visto un aumento del interés por el mercado saudí. Hay todavía muchísimas oportunidades porque hasta el momento el mayor interés lo han suscitado las empresas de mayor capitalización bursátil, pero existe un gran espectro de mid caps que ha estado totalmente ignorado hasta la fecha y es precisamente ahí donde creemos que surgirán las mayores oportunidades. Es cierto que los mercados están atravesando una situación complicada, pero a medio y largo plazo hay muchas oportunidades.

¿Cómo afecta el tipo de cambio a las inversiones en petróleo? Recurre usted a coberturas?

Nosotros contamos con el lujo dentro de la región de Oriente Medio y norte de África de contar con divisas respaldadas por el dólar, lo cual resulta estratégico porque somos exportadores de materias primas, que están respaldadas por el dólar. Consideramos que el par de divisas perdurará, y los gobiernos han mostrado su pleno interés en proteger ese par de divisas. Desde el punto de vista del riesgo cambiario, especialmente cuando comparamos Arabia Saudí o la región en su conjunto con otras economías emergentes, vemos que no se han visto afectadas por ningún tipo de fluctuación cambiaria, lo que resulta una de las principales ventajas a la hora de invertir en la región de Oriente Medio y norte de África.