La política comercial aislacionista traerá consigo una fragmentación del orden mundial tanto en 2026 como en años sucesivos. En consecuencia, "la diversificación será más importante que nunca para los inversores", dice Pilar García- Germán, Directora Asociada de ventas de Fidelity. 

En Estados Unidos, "su economía mantendrá el dinamismo por el impulso de la inteligencia artificial y los estímulos fiscales, apoyados en unos beneficios y márgenes robustos que reducen el fantasma de la desaceleración", argumenta Silvia Merino, gestora de ventas de Fidelity. No obstante, "los riesgos relacionados con la independencia de la Fed, la inflación y la concentración del crecimiento requerirán una cuidadosa monitorización".

¿Y en Europa? Álvaro Bárcenas, gestor de ventas de la gestora cree que "la inercia del crecimiento moderado se mantendrá con el viento a favor del estímulo fiscal alemán, pero a su vez, el viento en contra de los aranceles y la relación comercial con China. En cualquier caso, preveemos que la inflación vaya a la baja y, por tanto, el Banco Central Europeo mantenga los tipos a corto plazo con margen para recortes, cuando ésta seguramente caiga a partir del segundo trimestre". 

La IA seguirá marcando el paso de los mercados en 2026

En  el segmento de renta variable, la IA será la temática que marque los mercados de renta variable en 2026. Debería seguir dando impulso a las acciones y la tecnología subyacente tiene fundamento real, incluso aunque se planteen dudas sobre su aplicación. "Conviene comprender esos riesgos y saber dónde es mejor diversificar. Por ello es clave seguir invirtiendo en la temática de la IA, al tiempo que se busca aumentar la resistencia a través de fuentes de rentas y oportunidades fuera de EE.UU., como Europa, Japón y China".  En estos últimos casos, el sector tecnológico asiático debería seguir dando alegrías y la renta variable de Corea y Japón es atractiva.

A  medida que se deprecia el dólar, "nos estamos fijando en otras monedas en busca de exposición defensiva, como el euro y el yen. También nos parecen más prometedoras la deuda y las acciones emergentes y en este sentido, esperamos que Asia salga beneficiada el próximo año a medida que los inversores sigan diversificando y alejándose de los activos denominados en dólares", dice García - Germán. 

En el segmento de renta fija, será clave "buscar calidad para compensar la dispersión y los diferenciales estrechos. Analizar la deuda de los mercados emergentes en busca de riesgo selectivo. Considerar la duración, pero teniendo en cuenta que la inflación persistente obstaculiza la senda de relajación monetaria de la Fed". Además, es probable que los factores macroeconómicos hagan crecer el interés por los bonos asiáticos en moneda nacional. Los bonos high yield asiáticos parecen atractivos y presentan un conjunto de emisores más equilibrado.

Lea el informe completo con las Perspectivas de Fidelity para 2026: la era del alfa