Esta última fue la principal conclusión de la mesa en la que Estrategias de Inversión sentó a siete mujeres alfa del mundo de la inversión y de la empresa. La mayoría de ellas llegó las finanzas por casualidad. Estudiaron derecho “porque era donde te decían que había salidas en aquél momento”, explica la vicepresidenta de la CNMV Ana María Martínez-Pina. El resto de la mesa, asiente y sonríe.
Martínez-Pina, el único cargo institucional del encuentro, reconoce que representar al supervisor de los mercados le facilita la tarea a la hora de relacionarse con los altos directivos de las cotizadas españolas. Desde su organismo, asegura que se sigue muy de cerca la presencia de mujeres en Consejos de Administración y en puestos directivos. Algo en lo que “estamos un poco por debajo de la Unión Europea. El objetivo que nosotros marcamos en el código de buen gobierno corporativo era que en 2020 hubiera una presencia de un 30% de mujeres. Este año parece que estamos en el 23% con lo que parece muy optimista que lleguemos”.
Pero no puede ser que solo se exija en los Consejos de Administración. “Eso son solo los inversores. Hacen falta mujeres también en los comités ejecutivos”, le interpele con firmeza Lola Solana. A la mujer gestora más mediática de nuestro país, que puede enorgullecerse de dirigir el fondo más rentable de España (el Santander Small Caps) le cuesta encontrar valor en el territorio nacional bajo estos criterios. “Hemos lanzado el Equality Santander Acciones, que invierte en compañías donde las mujeres tienen un papel decisivo (o es el CEO o el CFO, hay poca brecha salarial,etc.). Es un fondo europeo y en España solo he encontrado cinco. En Francia un montón. En Inglaterra un montón. Y en España solo cinco y justo. Si buscas donde haya una política clara de diversidad, donde la brecha salarial sea baja, donde haya mujeres implicadas en las decisiones realmente… Hay solo cinco”.
¿Por qué en Francia o los países nórdicos sí y en España no? Extraña. Entre otras razones porque está demostrado que el 85% de los equipos donde existe diversidad de género a la hora de tomar decisiones y cumplen con los criterios de sostenibilidad son más rentables. Según Sol Hurtado de Mendoza, responsable de la gala BNP Paribas Asset Management en España y Portugal esto es así por dos razones. Por un lado “porque hay demanda. Todos los grandes fondos de pensiones internacionales o tienes temas de ESG o no trabajan contigo. Punto y final. Y, en parte también, porque ha habido una presión brutal de regulación, que ahora está llegando a España. Se dan a la par. En Francia se exige: o cumple con la normativa o me explica por qué no lo hace”. Esto hace que las empresas tomen conciencia sobre asuntos que quizá no se habían parado a evaluar. Ésto y la demanda del inversor, cada vez más exigente, que quiere ganar dinero pero le importa, y mucho, el cómo.
En este sentido, aunque todas las participantes de las mesa estuvieron de acuerdo en señalar que el compromiso medioambiental pesa más que el social y los criterios de buen gobierno (donde entra en juego el papel de la mujer), el optimismo es generalizado.
“Las cosas van a cambiar en breve”, dice Elisa Ricón Holgueras, Directora General de Inverco, no solo porque “las mujeres somos motores de cambio, sino porque incorporamos en las organizaciones una perspectiva que hasta hace muy poco no estaba presente y eso permite una mayor riqueza en las decisiones”, también por Bruselas. Ricón sigue muy de cerca el paquete de normas que se cuecen en Europa y las consecuencias en la transparencia que, junto con Mifid II, van a impactar en el mundo empresarial.
Respecto a la normativa, en diciembre se aprobó la Ley de Información no financiera y diversidad con la que se obliga a la empresa a dar mucha información sobre tipos de contratos, despidos, sueldos, género, etc. “Las empresas están ahora mucho más expuestas y obligadas a dar información de ese tipo. Las van a tener que publicar, y las va a obligar a reflexionar y a que alcancemos una mayor igualdad, sin llegar a las cuotas” explica Martínez-Pina.
Las cuotas y las auditorías salariales son otro de los asuntos tradicionales, estos días, a debate. Medidas, quizá no deseables pero sí necesarias como paso previo a conseguir facilitar a las mujeres el acceso a puestos tradicionalmente masculinos.
Derribando falsas creencias
¿Están las empresas dispuestas a admitir a día de hoy auditorias aleatorias? ¿Cuotas? Un claro “No” se escucha de manera generalizada. En este sentido, Gabriela Uriarte, directora del Proyecto Promociona y directora adjunta de Formación de la CEOE, cree que después de ver a las 612 directivas “súper potentes y súper listísimas” que forman parte del proyecto y que no llegan, es necesario fomentar la igualdad y dotar a las mujeres que quieren optar a cargos relevantes en una organización de referentes. “El proyecto Promociona pretende que haya más mujeres en puestos de responsabilidad y se dirige a las empresas. En él participan directivas que seleccionamos exhaustivamente y mentoras de los niveles más altos de responsabilidad, que mentorizan a directivas de otra empresa que están participando. Está funcionando y notamos que está cambiando mucho las cosas”.
En este programa de mentoring, la también mentora Sol Hurtado de Mendoza, asegura que “es mucho de ‘¡venga!’ ‘¡Qué sí que puedes! ¿Qué tienes a diez hombres a tú cargo? Bueno pues tú puedes'. Tienes que convencerlas”. Se trata de una falsa creencia. Ana Fernández Sánchez de la Morena, socia directora de AFS Finance Advisors, EAFI lo afirma rotundamente: “Las barreras están en la mente”.Asesoría, formación, coaching, mentoring… Tenemos esa responsabilidad de acabar con esa falsa inseguridad, que es falsa”.
El caso de Ana también es especial. Es una de las tres únicas mujeres de las 220 licencias de EAFI que hay en España. Sánchez de la Morena asegura que en su caso, que asesora también a muchos inversores particulares, se encuentra a muchas parejas en la que la decisión de inversión la toma finalmente la mujer. Desde su criterio se trata de presentar inversiones que entiendan. “Al hombre le mueve actuar y a la mujer aprender. Quizá lo que me caracteriza es asociar las emociones y los sesgos psicológicos cognitivos a la hora de tomar decisiones de inversión . Me parece fundamental”.
Abajo, de izquierda a derecha: Elisa Ricón, Ana Maria Martínez-Pina, Lola Solana y Andrea Carreras-Candi. Arriba, de izquierda a derecha: Gabriela Uriarte, Ana Fernández Sánchez de la Morena, Sol Hurtado de Mendoza y Eva Pla.
Mujeres que aportan alfa
En este sentido, las mujeres invierten de una manera diferente. Todas coinciden: son más pacientes. En la última encuesta de EFPA España, queda reflejado que las mujeres tienen un patrón distinto a la hora de invertir: mantienen menos apego a las inversiones en pérdidas (son menos aversas al riesgo), se deshacen más rápidamente de las inversiones con pérdidas buscando otras alternativas, al contrario que los hombres, que esperan una recuperación. La dirección de esta Asociación Española de Asesores y Planificadores Financieros la ostenta Andrea Carreras-Candi, quien cree que “las mujeresse fijan más en cómo afectan sus decisiones al entorno. Son menos individualistas”.
En lo profesional y en lo personal. Desde Inverco, Ricón Holgueras cree que es esencial el papel de las referentes femeninas en el mundo de la inversión no solo como ejemplo, sino también para explicar y ayudar a concienciar al resto de mujeres en la sociedad de la necesidad de tomar conciencia sobre la importancia de la gestión financiera en su calidad de vida y su futuro.
“Me preocupa la falta de interés de las mujeres por las finanzas. Somos más longevas y nuestras pensiones de jubilación son un 40% más bajas como consecuencia de salarios inferiores y carreras de cotización menos estables, por lo que necesitaremos complementar en mayor medida la futura pensión pública con ahorros bien invertidos durante nuestra etapa activa. Sin embargo, el interés por las finanzas y la cultura financiera, ya de por si bajos en España, lo son aún más entre el público femenino,” sentencia.
Para reflexionar.
