El 30 por ciento de las empresas españolas variará su política retributiva debido a la crisis, sobre todo en lo que respecta a la retribución variable, según un estudio elaborado por PriceWatherHouseCoopers (PWC), del que se desprende que el incremento salarial se ajustará al máximo al IPC en 2009. El informe, basado en entrevistas a los responsables de recursos humanos de 195 grandes y medianas compañías realizadas en septiembre para recoger el impacto de la crisis, fue presentado hoy por la responsable de retribución de PWC, Yolanda Gutiérrez, y la responsable del estudio, Almudena Hernández. Entre las empresas que se plantean corregir su política retributiva por la crisis,
el 26 por ciento tiene previsto congelar la masa salarial (casi el 8 por ciento del total), en tanto que el 43 por ciento cambiará el peso de los objetivos de la retribución variable, primando los objetivos globales frente a los individuales; y el 13 por ciento dará menos retribución variable. Además, el 4 por ciento reducirá los beneficios sociales, mientras que el 16 por ciento buscará que éstos sean más económicos.

