El gran alcance de la crisis financiera, sobre todo, durante el mes de marzo, "ha dejado naturalmente huella en el balance trimestral del Deutsche Bank", añadió Ackermann.Pese a todo, el presidente del citado banco se mostró optimista para el futuro y "convencido de que saldremos mas reforzados que nunca de ella".Los ingresos totales del Deutsche Bank se redujeron a la mitad durante el primer trimestre del presente año frente a las mismas fechas del año pasado, concretamente de 9.600 millones de euros a 4.600 millones de euros.Ackermann subraya que una parte importante de las elevadas pérdidas en el sector de inversiones bancarias pudo ser compensado mediante la venta de participaciones y una reducción de los costes de personal, así como una mejora del negocio con los clientes privados.