El objetivo es que el cálculo esté listo a tiempo de la cumbre de líderes europeos del 23 de octubre, en la que está previsto que se decida sobre la recapitalización de la banca.

La EBA está llevando a cabo una actualización de los test de estrés a la banca publicados en julio, que incluye quitas en los bonos de Grecia y el resto de países periféricos. La nueva evaluación se realiza tras constatarse que las pruebas de julio han quedado desfasadas porque no contemplaban un deterioro de la deuda soberana y no detectaron los problemas de la entidad franco-belga Dexia, que ha debido ser troceada y nacionalizada.

Para realizar el cálculo de las necesidades de recapitalización, la Autoridad pretende elevar del 5% al 9% el umbral de capital básico (tier 1) que deben mantener las entidades incluso en el peor escenario de estrés. El nuevo umbral, que casi duplica al de julio, ha chocado con la resistencia de Alemania, por lo que todavía podría modificarse antes de la publicación de los resultados.

Con este nuevo requisito, la mayoría de los bancos españoles suspenderían el examen y estarían obligados a recapitalizarse. Según los resultados de julio, sólo Banca March (23,5%), Kutxa (10,1%), Unicaja (9,4%) y BBVA (9,2%) superan el nuevo umbral, aunque sin tener en cuenta su exposición a la deuda.