Además, la filial de banca privada del Santander se quedará con los bonos emitidos por Lehman, asumirá su coste y formulará las reclamaciones pertinentes en el marco del proceso concursal en el que está inmersa la entidad y que se sigue en Nueva York. "Estamos buscando soluciones para nuestros clientes", se limitaron a señalar a Europa Press en fuentes de Banif.

La entidad confía en conseguir minorar el coste que le supondrá asumir las pérdidas de sus clientes si consigue que prosperen las reclamaciones que formulará en el proceso judicial abierto en Estados Unidos.


La iniciativa de Banif cobra gran importancia en la medida en que en este tipo de productos son los clientes quienes asumen el riesgo de la inversión, algo que está recogido en los contratos, y las entidades actúan sólo como comercializadoras del producto.

Fuentes del sector financiero señalaron a Europa Press que el problema es que Lehman quebró el pasado 14 de septiembre "de forma inesperada", y un día antes de la suspensión de pagos contaba con una "alta calificación crediticia, superior a la de la mayor parte de las cajas de ahorros españolas".

Además de Banif, entre las entidades comercializaron estos productos entre sus clientes están aquellos más activos en banca personal, como Banco Urquijo, Citibank o Bankinter y BBVA, entre otros.

BANIF SEGUIRÁ COMO ENTIDAD INDEPENDIENTE

Ante los rumores que apuntaban a la posibilidad de que Santander pudiera plantearse absorber a su filial especializada en banca privada y asesoramiento de inversiones, fuentes del Santander confirmaron ayer a Europa Press que Banif "continuará funcionando como una entidad independiente".

Banif cuenta con "un modelo de negocio exitoso" que aportó 34 millones de euros de beneficio neto a los resultados del grupo Santander al cierre de junio, un incremento interanual superior al 40%.

El volumen de recursos gestionado por la filial de banca privada del Santander se situaba al cierre de septiembre en 32.500 millones de euros, unos 4.500 millones por debajo del saldo con que comenzó el ejercicio, lastrado por la evolución de los mercados, igual que otras entidades.

Banif comercializó en 2007 unos 350 productos estructurados distintos, emitidos por diversas entidades, y apuntó que sus clientes son "aficionados" a este tipo de productos, que garantizan el total o gran parte de la inversión principal, con atractivas rentabilidades.

La Plataforma de Afectados por la quiebra de Lehman calcula que el importe invertido de clientes de Banif en productos estructurados emitidos por el banco de inversión estadounidense alcanza los 600 millones de euros.

Los productos estructurados son instrumentos que se forman con un activo de renta fija, normalmente un bono, y derivados que permiten referenciar la rentabilidad del producto a un activo determinado. Estos productos suelen ofrecer rentabilidades muy atractivas y garantizan toda o casi toda la inversión inicial.