Recogida de beneficios en Wall Street tras tres sesiones de subidas

La sesión del jueves comienza en Wall Street en negativo. El Dow Jones baja un 0,32%, el S&P 500, un 0,42% y el Nasdaq, un 0,33%.

Con el Dow Jones en los 26.178,66 puntos, la mayor subida del índice es la de Boeing, que repunta un 3,86%, por delante de Dow y McDonald's, que se revalorizan un 0,67% y un 0,13%, respectivamente.

Por el contrario, Johnson&Johnson encabeza los descensos del Dow Jones, al recortar un 1,11%, seguido de Caterpillar, que se deja un 1,02% y de Home Depot, que resta un 0,94%.

Las caídas en la apertura de hoy en Wall Street se producen tras tres sesiones consecutivas de suidas en el parqué neoyorkino. Solo ayer, el Dow Jones subió un 2,05%, aupado por tercer día consecutivo por las reaperturas de partes de EEUU, la recuperación de la economía del país y la sensación entre los inversores de que lo peor de la crisis del coronavirus ya ha pasado.

 

La bolsa neoyorquina cerró con ganancias por el optimismo con respecto a los datos macroeconómicos, especialmente tras la publicación de un informe de Moody's Analytics que estima la caída de empleos privados en 2,76 millones, muy por debajo de los cálculos previos de los inversores, lo que aumentó la confianza en que los peores efectos derivados de la pandemia ya han quedado atrás.

Hoy se ha conocido que la cifra de personas en Estados Unidos que pidieron ayuda por desempleo se ubicó bajo los 2 millones la semana pasada, por primera vez desde mediados de marzo, pero sigue siendo muy alta en momentos en que las empresas se ajustan a un escenario que ha cambiado drásticamente por causa del COVID-19.

 

Los pedidos iniciales de ayuda estatal por desocupación totalizaron una cifra desestacionalizada de 1,877 millones en la semana al 30 de mayo, menos que los 2,126 millones de la semana previa y en línea con las previsiones de los expertos.

Los principales índices de Wall Street se han recuperado en las últimas sesiones, con el índice Nasdaq a poca distancia de superar un alto récord histórico en febrero. "El mercado debe detenerse", dijo Christopher Grisanti, estratega jefe de acciones de MAI Capital Management en Cleveland, Ohio.

"Es realmente importante darse cuenta de que los inversores de renta variable estadounidenses han recibido un gran regalo en medio de lo que probablemente sea la recesión más profunda en 80 años", dijo, refiriéndose a la fuerte carrera de Wall Street desde fines de marzo.

La jornada arranca en rojo en Wall Street, es decir con el mismo tono que tiñe las bolsas europeas, a pesar de que el Banco Central Europeo (BCE) ha incrementado su programa de compra de bonos en un nuevo esfuerzo por apoyar la economía de la zona euro, que se ha visto muy afectada por más de dos meses de confinamientos debido a la pandemia de coronavirus.

 

El BCE aumentó el tamaño de su Programa de Compras de Emergencia Pandémica (PEPP por sus siglas en inglés) de 750.000 millones de euros a 1,35 billones de euros (1,52 billones de dólares) y lo prorrogó hasta junio de 2021 como mínimo, con la promesa de reinvertir los ingresos al menos hasta finales de 2022.

La medida tiene como objetivo dar un respiro a los Estados, que están acumulando importantes déficits presupuestarios para amortiguar el impacto de la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial.

"En respuesta a la revisión a la baja del horizonte de proyecciones de inflación por la pandemia, la expansión del PEPP relajará aún más la postura general de política monetaria, apoyando las condiciones de financiación de la economía real, especialmente para las empresas y los hogares", dijo el BCE.

El euro avanza frente al dólar y se intercambia a 1,125 billetes verdes.

En el mercado de materias primas, los precios del petróleo caen ante las dudas sobre la capacidad de los productores de acordar una extensión de los recortes récord de bombeo, lo que se acentuó por las preocupaciones de un aumento en los inventarios de combustible de Estados Unidos.

Arabia Saudita y Rusia, dos de los mayores productores de petróleo del mundo, acordaron apoyar una extensión en julio de los recortes de suministro de 9,7 millones de barriles por día (bpd) respaldados en abril por el grupo OPEP+, que comprende a la Organización de Países Exportadores de Petróleo y otros grandes productores.

Las existencias de gasolina subieron en 2,8 millones de barriles, a 257,8 millones de barriles, de acuerdo a datos publicados el miércoles por la gubernamental Administración de Información de Energía (EIA, por su sigla en inglés).