Los datos recogidos en la elaboración de este informe muestran, en líneas generales que los españoles siguen viajando, que no renuncian a ello, y que lo que sí hacen es recortar su presupuesto y adaptarse a las circunstancias del momento.

Por ello, se destaca que no hay un cambio de hábitos, sino de actitud motivada por la crisis, y se pone de ejemplo a las vacaciones de la pasada Semana Santa, ya que han aumentado los desplazamientos hacia el interior en detrimento de los del exterior, con una ocupación media del 75 por ciento.

De los establecimientos consultados, el 48,5 por ciento reconoce que el 68,9 por ciento de sus clientes han efectuado estancias más cortas, y que el 58,3 por ciento utilizan menos servicios para gastar menos.