Era toda una incógnita lo que podía suceder en el universo de las monedas virtuales a cuenta de la última actualización de Ethereum, que, aunque retrasada desde marzo se ha hecho presente el pasado día 12. Y lo que se esperaba eran retiradas masivas ante la inmovilidad producida tras la fusión de ETH y las ahora retiradas de los staking que ya son posibles, lo que cierto es que la mejora del precio se ha evidenciado por encima del 12%.
Una buena noticia que llevaba a niveles por encima de los 2.000 dólares por activo que no se veían en el valor desde el pasado mes de agosto, sobre los que ha retrocedido esta semana, y con igual virulencia, ha y que decirlo hasta en un 12,5%.
Y las razones van más allá de que se haya apaciguado el furor comprador tras ‘Shapella’. Porque el caso es que Bitcoin también ha perdido en niveles parecidos, y lo que en principio parecía ser una retirada en masa de las recompensas y los ETH se está realizando de forma mucho más ordenada.
En su gráfica de cotización observamos que Ethereum vemos que el activo recorta un 12,5% en una semana, con ganancias que mantiene en el mes del 3,2%, y en el trimestre del 14,5%. Ya en el año, sus avances rozan el 53%. Y es que todavía se aparta un 162% de sus máximos históricos de 4.800 dólares por activo registrados en noviembre de 2021.
En cuanto a su capitalización supera los 219.890 millones de dólares en el puesto 52 de la clasificación mundial entre Pfizer y McDonald, mientras que eleva hasta un 18% su peso en el total de las criptomonedas con 1,2 billones de valor global. Por su parte, el índice del miedo y la codicia para las criptodivisas se mantiene en los 53 y vuelve a zona neutras desde sus máximos anuales del 64 en el mes pasado y de 58 la semana anterior.
También las premisas de la SEC y la nueva regulación europea, que empieza a dar sus primeros frutos a cuenta de la denominada MiCA, un reglamento que busca regular desde la emisión hasta la negociación de los criptoactivos en todos los países comunitarios es la primera muestra efectiva en la Unión Europea sobre esta reglamentación que busca poner algo de orden en un valor cuya volatilidad e incertidumbre sin respaldo es uno de sus grandes debes.
De momento, la última actualización sí parece haber elevado el interés abierto por parte de los inversores institucionales sobre Ethereum. Los datos del CME de Chicago indican que se han elevado los contratos de futuros sobre ETH un 39% hasta acercarse a la cifra de 6.248.
Y, además, sobre la retirada con la idea por ejemplo que marcaban desde eToro sobre los grandes stakers hay novedades. Se trata de los datos que maneja The Block, en el que se destaca que los depósitos comienzan ya a superar los retiros, que además algunos han ido estableciendo de forma progresiva y que se materializarán, eso sí con listas de espera y ‘colas’ virtuales a lo largo del mes de mayo de forma ordenada.
De esta forma, en datos de token.unlocks se han producido depósitos en los últimos días por valor de 91.500 ETH con retiradas muy inferiores en un día, que supera los 64.830, con un saldo neto como vemos que supera los 26.600 ETH. En una dinámica que incluso ha ido in crescendo, y que se contrapone a las retiradas iniciales superiores al millón, frente a depósitos de 600.000 ETH.
Además, el suministro de Ethereum ha ido decayendo a una tasa del 0,502% anual, que casi ha suplicado la tasa de consumo del último mes y ha sido sustancialmente mayor a la tasa de consumo que se produjo después de ‘La Fusión’ del 0,134% al año.
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