El móvil nos recomienda modificar la tarifa del recibo del gas, revisar los niveles de glucosa o cambiar el aceite del coche. Son escenas cada vez más habituales en España y que conforman la llamada Cuarta Revolución Industrial, una nueva fase en la que la tecnología pasa de ser una herramienta de acceso a información para convertirse en un medio que ofrece soluciones personalizadas en función de las necesidades del usuario.
Esta es una de las conclusiones del informe de la Sociedad Digital en España 2017, que acaba de publicar Fundación Telefónica y que apunta a la tecnología como el medio que abre las puertas a la ‘sociedad cognitiva’, una sociedad en la que la experiencia y evaluación del usuario genera un conocimiento que permite, a su vez, información y servicios a medida. En este proceso, la nteligencia artificial y el Internet de las Cosas (IOT) juegan un papel crucial, ya que permiten analizar primero y generar después soluciones personalizadas en todos los ámbitos, desde la formación hasta la salud o el ocio, por ejemplo.
Así, España se prepara ya para dar el salto de la Sociedad Digital a la Sociedad Cognitiva gracias a que cuenta con la tercera red de acceso mediante fibra más extensa entre los países de la OCDE, según este informe, que construye una versión global y original sobre el ecosistema digital en España a través de fuentes
externas de reconocido prestigio, datos estadísticos de las unidades de negocio de Telefónica e información territorial proporcionada directamente por las comunidades autónomas.
Por lo tanto, la española ya es una sociedad digital gracias a los servicios de la banda ancha de acceso móvil, en una transformación imparable que constituye hoy no solo el “reto”, sino también la “solución” a nivel tecnológico: el futuro, en el que convergen robótica e inteligencia artificial, dependerá de la rapidez de
adaptación al nuevo paradigma y de la digitalización como herramienta esencial para llegar a todos los ámbitos, incluso para aquellos más vulnerables. Así, las redes y las tecnologías están prácticamente en todos los aspectos de la vida.
En 2017, España siguió siendo un país líder en el despliegue de fibra óptica hasta el hogar, con más clientes que Alemania, Reino Unido, Francia e Italia juntos. España es, a día de hoy, el claro líder europeo en acceso de fibra hasta el domicilio del usuario (FTTH), la única tecnología que puede garantizar una elevada calidad de servicio de forma permanente, con unos costes de mantenimiento muy bajos.
España dispone también de una cobertura de banda ancha de acceso móvil 3,5 G que alcanza prácticamente a la totalidad de los hogares españoles, mientras que la cobertura 4G (LTE) llega al 94%. El informe destaca además la necesidad de ir adecuando progresivamente las infraestructuras hacia el 5G.
La España de la Sociedad Digital se asoma incluso a la Sociedad Cognitiva, en la que el uso de la inteligencia artificial y los sistemas cognitivos de toda la información proporcionada por los dispositivos conectados –Internet de las cosas– solucionarán problemas de salud, educación, energía y transporte, de forma que el país se sitúa ya a las puertas de la llamada Cuarta Revolución Industrial. Aspectos como la actividad digital del ecosistema empresarial y el sector público y, por supuesto, los elementos más vanguardistas de la transformación digital, la economía 2.0 y el blockchain, por mencionar algunos, apuntan a ese cambio de paradigma social que se está viviendo.