Sin embargo desde ese día, los títulos de la red social del jilguero se instaló en una tendencia bajista que le llevó a peder alrededor de un 60% hasta mayo de este año. En ese momento tocó sus mínimos alrededor de los 30 dólares por acción, apenas unos dólares por encima del precio al que salió a cotizar.
Es decir, que los inversores que entraron en la OPV nunca han perdido dinero con esta apuesta. Es más, hoy por hoy aún se apuntan unas ganancias de un 90%. No ocurre lo mismo con todos aquellos que entraron el mismo día de su debut o los dos meses siguientes. Esos siguen perdiendo dinero, aunque parece que el ánimo es ahora positivo para el valor.
Como las comparaciones son odiosas, y quizá por ello gustan, a Facebook le ocurrió lo mismo cuando se estrenó en bolsa en mayo de 2012. La mayor red social del mundo también perdió alrededor de un 50% en los primeros meses, aunque desde sus mínimos de septiembre de 2012, sus acciones se revalorizan un 300% gracias, en gran parte, a los resultados presentados hace ahora algo más de un año. Desde julio de 2013 sus accionistas se apuntan alrededor de un 180%.
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¿Pasará lo mismo con Twitter? En principio el gran catalizador para la subida de la firma desde finales de julio también han sido los resultados. A pesar de presentar unos beneficios que palidecen ante los de Facebook, lo cierto es que los analistas alabaron el crecimiento de usuarios mensuales únicos, el aumento de los ingresos por publicidad y el hecho de que en la actualidad más de un 80% de los ingresos procedan de plataformas móviles.
Precisamente fue ese el catalizador de Facebook hace un año y, probablemente, detrás de esa métrica está el anuncio de hace unos días en el que se comunicaba que la empresa podría estar pensando en poner en marca una plataforma de e-commerce que facilitará a sus usuarios realizar compras desde la web.
Algunos analistas destacan también algunas pautas de carácter técnico. Ha sido importante el hecho de que en estos momentos la compañía ya lleva más de 200 sesiones cotizando, por lo que ya se puede trazar una media móvil de ese periodo, algo muy importante para muchos analistas. En estos momentos, Twitter cotiza por encima de esa media, lo que apunta a que podrían seguir produciéndose subidas en las próximas semanas. Avisan otros analistas que en junio ya había superado la media de 50 jornadas.
Los últimos datos muestran también que también se ha reducido el número de posiciones bajistas en el valor. A mediados del mes pasado eran apenas 21,6 millones de acciones, por debajo de las 31,3 millones de unas semanas antes. Se trata, además, de la cifra más baja en su historia. Hay que recordar que el pasado mes de abril, los inversores que esperaban las caídas de Twitter en bolsa tenían en sus manos alrededor de 50 millones de títulos.
Los optimistas piensan que la compañía ha dado un giro a su rumbo y que en la actualidad está en el camino de las subidas, tal y como ocurrió con Facebook. Sin embargo los hay que siguen alertando sobre la valoración de la empresa.
De hecho, si se echa mano del ratio PEG a 12 meses, es decir, el que divide el PER entre la tasa de crecimiento -en este caso de las ventas- (Twitter podría mantenerse en pérdidas este año), el panorama es muy claro.
Twitter cotiza a un PEG ventas a 12 meses de 2 veces, muy por encima de Facebook (1,1) o de Google (1).
Por eso muchos inversores siguen manteniendo la cautela y esperan a ver cómo son las cuentas de los próximos trimestres. Mientras tanto Twitter sube más de un 30% desde resultados.
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