En primer lugar nos gustaría hablar sobre el oro. El año pasado fue el primero en más de una década y sufrió la mayor caída en más de 30 años. La mayoría de los expertos pensaban que 2014 iba a ser también un mal año para el oro, pero desde enero el precio de este metal ha rebotado y está otra vez cerca de 1.300 dólares. ¿Por qué?

La razón por la que hemos visto un fuerte rebote del oro este año se debe sobre todo a cuestiones relacionadas con su carácter de activo refugio. A principios de año éramos bastante positivos con el oro. Pensábamos que el oro iba a vivir un rally en los primeros tres, seis meses del año hasta los 1.450 dólares. La razón por la que hemos visto esta subida radica en la situación en los emergentes y en la depreciación de algunas divisas como el peso argentino, el real brasileño y la lira turca que han dado lugar a una compra de activos considerados refugio. Luego hemos asistido a otra ronda de compras de activos refugio motivada por la crisis en Ucrania y Crimea. Por tanto, hemos visto más compras guidas por esta búsqueda de activos refugio que por cualquier cambio estructural o técnico en el mercado que hayan llevado a un aumento de la demanda física de oro.

¿Qué espera para el resto del año? ¿Cuál es su objetivo?

Nuestro objetivo sigue en línea con el nivel de los 1.450 dólares. Por tanto, pensamos que el oro sigue teniendo potencial de subida. Actualmente lo que estamos viendo es más una fase de corrección. Creemos que en los próximos dos o tres meses podríamos ver más incrementos en el precio del oro, que luego podría caer en concordancia con mis expectativas de que podríamos ver un dólar débil en los próximos meses. Todas estas cuestiones podrían funcionar bien juntas. De nuevo, precios altos para el oro en los próximos tres meses.


¿Qué recomendaría en estas circunstancias: una posición neutral, vender o comprar oro?

Hoy en día diría que es buen momento para comprar oro de forma táctica. Considero que 1.250 – 1.260 es un buen nivel para comprar oro. Es un buen abanico para comprar. Por el contrario, cuando alcance niveles de 1.430-1.450 será momento de vender.


Nos gustaría también hablar del precio del petróleo. En este momento su rango de precios está por debajo de 110 dólares (para el barril de Brent). ¿Qué podríamos esperar si el conflicto en Ucrania empeora?

El conflicto en Ucrania probablemente tendrá un impacto menor en el precio y en el mercado de energía de lo que la genta espera. La cuestión en Ucrania tiene un trasfondo mucho más geopolítico, en el sentido de que Rusia está intentando establecerse en la región, sobre todo en la región de Crimea, debido a su importancia estratégica en términos geopolíticos. Si la situación en Ucrania empeora sin duda esto tendrá un impacto en las importaciones de gas natural a Ucrania. Será, sobre todo, una cuestión de índole local. Claramente Rusia depende mucho del capital que consigue a través de la venta de gas natural y crudo a Europa. Europa es su principal consumidor. Por tanto, creo que la posibilidad de que Rusia intente empeorar la situación para Europa es menos probable. Ambos se necesitan el uno al otro: uno a nivel financiero y el otro a nivel energético. Por ello, el impacto será menor. Quizá un impacto más localizado y doméstico para Ucrania.

¿Cuál es el abanico de precios que podríamos ver?

En el mercado de crudo, sobre todo en lo que respecta al barril de Brent, somos bastante optimistas. Creemos que todavía queda potencial de revaloración en el mercado Brent y también en el mercado WTI (de Texas). Actualmente estamos en 108, 109 dólares para el barril de Brent, y podríamos llegar a 116-118 dólares. Otro aspecto interesante es que podríamos ver de nuevo un aumento de la brecha entre el barril de Brent y el de Texas. Hay todavía potencial de subida para el barril de Texas, pero más probablemente veremos más revaloración en el mercado Brent, pues pensamos que este mercado, en términos físicos, está más ajustado hoy en día para precios más altos. Esperamos que el diferencial entre ambos mercados se amplíe en los próximos meses y además consideramos que un nivel de 112 a 115 dólares es posible dado el nivel actual y, por tanto, una diferencia de unos siete dólares.

¿Cuál es su estrategía para invertir en crudo en 2014?

Nuestra estrategía, como he comentado, se centra en la brecha entre el barril de Brent y de Texas que esperamos que aumente. Creemos que existe potencial de revaloración para el barril de Brent que podría alcanzar los 118 dólares. Hoy en día, en el mercado de crudo no se puede ser muy estratégico, por lo que hay que ser más táctico. El rango de precios que vamos a ver irá entre 105 hasta 118-120 dólares.

¿Qué le diría a los inversores que quieren apostar por las commodities este año?

2014 va a ser un año interesante para las commodities. Va a ser más un año de transición en el que empezaremos a ver que los fundamentales reales estarán otra vez descontados en los mercados de commodities. Lo hemos empezado a ver en lo que llevamos de año. No creemos que vayan a darse rentabilidades del 20 ó 25% para las commodities, pero pensamos que veremos retornos absolutos positivos en los precios pues, como decíamos ,los fundamentales están siendo otra vez tenidos en cuenta el mercado, estamos viendo mejoras en la economía americana y a nivel global la economía está bastante bien. Y también si se analizan las rentabilidades roll en el mercado de commodities son asimismo positivas. Todo esto nos dice que hay algunas tendencias estructurales en el mercado por lo que pensamos que de nuevo va a ser un buen año.

¿Considera que la falta de fortaleza de la economía china, la posibilidad de subida de tipos en Estados Unidos y una situación en Europa que todavía sigue sufriendo crean un buen escenario para invertir en commodities?

Sí. La subida de tipos suele ser un indicativo de una mejor situación en la economía. Cuando se produzca una subida de tipos en Estados Unidos, potencialmente en 2015, vendrá respaldada por un ciclo económico más sólido y maduro y con esto entendemos que veremos un aumento de las presiones inflacionistas cíclicas, sobre todo procedente de una presión inflacionista en los salarios, y los precios de las commodities se verán repercutidos. Asimismo, creemos que el exceso de capacidad de la economía americana se irá reduciendo. En general, pensamos que la situación está mejorando en Estados Unidos.

En relación a China, sin duda hemos asistido a un escenario menos positivo en lo que llevamos de año. Pero de nuevo no creemos que se vaya a producir un colapso significativo en el sistema bancario chino. Habrá mucha volatilidad, mucha incertidumbre en torno a China, pero seguimos pensando que china va a estar en una tendencia relativamente buena de crecimiento de en torno a un 7 ó 7,5% para este año.

¿Qué recomendaría? ¿Son las soft commodities una buena alternativa?

Cuando se analiza la situación de las soft commodities, en lo que llevamos de 2014 hemos visto un fuerte repunte en el precio del café a principios de año. No hemos participado en él. Creemos que se trata de un rally que no es sostenible y que podríamos ver caídas en los precios. Las soft commodities son interesantes, pero de nuevo, a nivel estratégico, donde podríamos ver algunas tendencias interesantes es en el mercado de grano en los próximos meses. Sin embargo, vemos más interés en las commodities fuertes y en algunas de las commodities líquidas como el crudo o el petróleo.

Le hago la última pregunta, ¿cuál sería su cartera perfecta para invertir en commodities este año?

Es siempre difícil construir una cartera perfecta pues los mercados de commodities cambian mucho. Tenemos algunas convicciones sólidas para este año: habrá operaciones de fusiones y adquisiciones; creemos que el mercado de la energía tiene potencial de revalorización; la brecha entre el mercado Brent y de Texas aumentará y vemos algunas ideas interesantes aquí; el mercado de gas natural americano también es interesante y podría ofrecer algunas ideas atractivas; los inventarios están en niveles mínimos y tendrán que recuperarse durante el verano y, por tanto, vemos potencial aquí. En cuanto a los metales industriales, nos parece que el níquel tiene unos fundamentales muy sólidos y podría alcanzar niveles de 23.000-24.000 en los próximos meses. Por último, en cuanto a los precios del cobre, se trata de una cuestión difícil, pero si volviera a situarse en torno a los 6.200-6.300 probablemente lo compraríamos.