Lo más notable es el creciente consumismo de la región, con una demanda interna que desempeña un papel cada vez más importante como respaldo del crecimiento al aumentar la disponibilidad del crédito al consumo e hipotecario.Alain Bourrier y Plamen Monovski, gestores del fondo MLIIF Emerging Europe de BlackRock MLIM, consideran que la liberalización económica, la mano de obra cualificada de bajo coste y los elevados precios del petróleo y las materias primas, seguirán contribuyendo al crecimiento. Además se está produciendo un traslado desde los ingresos generados por las exportaciones hacia el valor generado internamente por el creciente gasto de los consumidores. El fondo invierte en tres áreas principales en toda la región de Europa Emergente: Rusia y la Confederación de Estados Independientes (CEI), los nuevos estados miembros de la UE y Turquía.Los ‘estados fronterizos’ de Kazajistán, Ucrania y Georgia ofrecen a los inversores oportunidades de crecimiento potencialmente sólidas ya que estos mercados experimentan un proceso de reforma significativo y se benefician de su proximidad a la UE.Alain Bourrier, co-gestor del MLIIF Emerging Europe Fund de BlackRock MLIM, afirma: “Estamos observando un cambio desde los ingresos generados por las exportaciones hacia aquellos generados en el mercado interno. La demanda interna comienza a suplantar a la demanda de exportaciones como motor principal del crecimiento económico regional. En nuestra opinión, la escalada del gasto interno de los consumidores, alentado por un crédito cada vez más asequible, podría aislar a las economías de la región frente a un crecimiento más débil de laç demanda global”.“Lo más significativo es que la mayor economía de la región, Rusia, comenzará a reducir su dependencia de los flujos de ingresos asociados a las materias primas. A medida que la boyante demanda de bienes y servicios de los consumidores, la inversión empresarial y el gasto público insuflen nueva vida en amplios segmentos de la economía, incluidos los sectores de consumo, distribución, financiero y de la construcción, esperamos que disminuya su dependencia de los ingresos del petróleo y el gas”.Plamen Monovski, co-gestor del fondo, añade: "Cada país de la región ofrece una oportunidad de inversión atractiva. Desde la historia de convergencia en curso de los nuevos estados miembros de la UE hasta la aparición de las economías “fronterizas” de la antigua Unión Soviética, la diversidad de estos mercados ofrece a los inversores distintos métodos para sacar partido del sólido crecimiento continuado de la región.Los inversores también se benefician del gran número de nuevas compañías que llegan al mercado en toda la región. Aunque esta robusta cartera de OPV ha añadido una profundidad considerable a los sectores importantes existentes, también observamos que algunos sectores anteriormente poco representados comienzan a hacer notar su presencia".