Telefónica recurrirá ante el Tribunal de Luxemburgo la multa de 152 millones de euros que hoy le ha impuesto la Comisión Europea por abuso de posición dominante al no considerar justos los precios mayoristas de banda ancha que la operadora española ha cobrado a sus rivales. Según el Ejecutivo europeo, con esos precios Telefónica dejó un escaso margen entre el precio mayorista cargado a los operadores y el precio minorista cobrado a sus propios clientes. En una nota de prensa, "Telefónica rechaza por injustificada y desproporcionada la decisión de Bruselas, tanto en el plano jurídico como económico y de mercado, pues ha cumplido escrupulosamente con la normativa vigente impuesta por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT)". Se trata de la mayor sanción impuesta por el Ejecutivo europeo a un grupo de telecomunicaciones.