La estimación media de 31 economistas consultados por Reuters para el informe ADP, desarrollado de forma conjunta con Macroeconomic Advisers, era de una pérdida de 250.000 puestos de trabajo en el sector privado en agosto. "Pese a los recientes indicios de que la actividad económica general se estabiliza, el empleo, que suele seguir desde atrás a la actividad económica general, aún podría bajar al menos varios meses más, aunque a un ritmo menor", dijo ADP.

Su informe es seguido de cerca por los mercados porque se le considera un buen anticipo del informe sobre las nóminas no agrícolas que elabora mensualmente el Gobierno estadounidense y que se dará a conocer el viernes.

PRODUCTIVIDAD

Otro dato conocido el miércoles fue el de la productividad de las empresas estadounidenses, que en el segundo trimestre del año subió más de lo informado preliminarmente, ya que las compañías recortaron costos para proteger sus ganancias.

El informe del Departamento de Trabajo dijo que la productividad no agrícola subió a una tasa anual de 6,6 por ciento en lugar del 6,4 por ciento reportado anteriormente. Fue el mayor incremento en la productividad desde el tercer trimestre de 2003.

La productividad subió a un ritmo anual del 0,3 por ciento en el primer trimestre.

Los analistas consultados por Reuters esperaban que la productividad, que mide la producción del trabajador por hora, no registrara cambios frente al dato preliminar de un avance de 6,4 por ciento en el segundo trimestre.

Pese al incremento en la productividad, la producción cayó a una tasa de 1,5 por ciento en el segundo trimestre, dijo el Departamento de Trabajo, sin cambios frente a la estimación anterior difundida el mes pasado, ya que más de seis millones de empleos han sido eliminados desde que comenzó la recesión en diciembre del 2007.

Las horas trabajadas bajaron a un ritmo de 7,6 por ciento en el periodo abril-junio frente al primer trimestre, sin cambios con respecto a las estimaciones preliminares del mes pasado.

Los costos laborales unitarios, una medida de inflación y de presiones de ganancias observada de cerca por la Reserva Federal, bajaron 5,9 por ciento, el mayor declive en nueve años.

Los analistas esperaban que los costos laborales unitarios bajaran un 5,8 por ciento en el segundo trimestre. Los costos laborales unitarios descendieron un cinco por ciento en el trimestre enero-marzo. En la comparación anual bajaron 1,2 por ciento.