Los ingresos totales del grupo en los nueve primeros meses de 2011 ascendieron a 197,17 millones de euros, lo que supone un incremento del 9% respecto al mismo periodo de 2010, mientras que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) arrojó un saldo negativo de 4,6 millones de euros, frente a las ganancias de 2,96 millones de euros de septiembre de 2010, lastrado por los resultados negativos de la división de infraestructuras.

En concreto, esta división ha aportado al grupo un EBITDA negativo de 5,7 millones de euros en los nueve primeros meses del año.