La Reserva Federal estadounidense (Fed) anunció la semana pasada una disminución de medio punto de porcentaje en las tasas de interés, en la esperanza de ayudar a la economía a superar las turbulencias de los mercados financieros y la crisis desencadenada por los préstamos hipotecarios de riesgo (subprimes).Sin embargo, esta bajada de los tipos de interés -situados ahora en 4,75%- ha hecho menos atractivas las colocaciones en dólares que las realizadas en otras divisas, sobre todo en euros.A ello se une la tendencia del Banco Central Europeo, que contrariamente a su homólogo estadounidense, está inmerso en un ciclo de subida de sus tipos.Asimismo, la disminución de los tipos estadounidenses podría desencadenar un aumento de la inflación, otro motivo de desconfianza ante el billete verde para los inversores."Predecimos una depreciación general del dólar para el resto de 2007 y hasta 2008, sobre todo con respecto al euro. El crecimiento estadounidense será probablemente inferior a su potencial en 2008, ya que pese a que la política monetaria de la Fed ha aliviado los mercados, no ha puesto fin a los problemas causados por la contracción de liquidez", dijo Gabriel de Kock, analista del banco estadounidense Citi.El euro podría subir hasta los 1,44 dólares en los próximos dos meses, consideró también un gran banco europeo al precisar que se da "una debilidad general del dólar".