El funcionario realizó sus declaraciones antes de la reunión del viernes del G7 y las reuniones de otoño del Banco Mundial y el FMI, que se celebrarán este fin de semana. Zoellick dijo que el G-7 también debería ver más allá de la turbulencia financiera que afecta a sus países para ayudar a las naciones más vulnerables. Añadió que como la crisis es internacional, las acciones y reformas necesarias deben ser multilaterales.