Según datos de ADP (Automatic Data Proccesing), la mayor procesadora del mundo de altas privadas, las empresas estadounidenses crearon 38.000 puestos de trabajo. Esto supone un batacazo considerable para el empleo privado que ha visto como dramática la comparación que se puede realizar con el mes de abril, cuando se crearon 179.000 puestos de trabajo.

La cifra, por tanto, ha sido de lejo mucho peor de lo esperado. Los analistas pronosticaban aproximadamente unos 175.000 nuevos puestos de trabajo y nada más lejos de la realidad. De hecho, se esperaba también la anunciada contratación masiva por parte de la cadena de comida rápida McDonalds tuviera un reflejo positivo en estos datos. Recordamos que incrementó su plantilla en 60.000 personas dentro de Estados Unidos.

Ahora, el mercado americano mira con preocupación al viernes cuando se den a conocer los datos de empleo público puesto que el ADP está considerado un adelanto por parte de los analistas.