Berkshire Hathaway es propietaria de un gran número de empresas rentables que producen enormes cantidades de caja libre. Su estructura de capital es una fortaleza, la contabilidad es conservadora y los accionistas son considerados y tratados como lo que son, propietarios. Berkshire tiene todas las cualidades que buscamos en una empresa para “permanecer rico”: es defensiva, fiable, crece a un ritmo saludable y está barata.
Una parte significativa de los negocios de Berkshire -seguros, energía y ferrocarriles- están muy desacoplados del ciclo económico. Su naturaleza y su recurrencia le han proporcionado (y le siguen proporcionando) a Warren Buffett recursos estables con la que invertir de manera ventajosa en activos que complementan y enriquecen a los accionistas de Berkshire.
"Creemos que los dos primeros tienen tiempos propicios por delante. En seguros estamos entrando en un ciclo favorable de precios después de unos años difíciles y Berkshire Energy se ha convertido en una plataforma fabulosa de crecimiento longevo en energías renovables. En cuanto a BSNF, el negocio de transporte ferroviario de mercancías, indudablemente ha sufrido durante esta crisis, pero la variabilidad de sus costes (y la ausencia de apalancamiento) le han permitido mantener intacta su capacidad de generar resultados en cuanto la economía recupere la normalidad", explican desde la gestora liderada por Enrique Pérez-Pla.
La otra pata de los negocios de Berkshire, la división llamada MSR, nutrida por una amalgama de compañías industriales y de servicios, va a ser una gran beneficiaria de la recuperación cíclica de la economía americana en los dos próximos años.
En cuanto a la cartera de valores, a día de hoy está integrada por compañías fabulosas como Apple, Coca Cola, American Express o Bank of America, cotizando, con algunas excepciones, con valoraciones un tanto exigentes. "El otro gran activo que nos atrae de Berkshire es la caja, que asciende a casi 150.000 millones de dólares y que proporciona, a nuestro entender, una gran opcionalidad", comentan desde Bestinver.
Cómo valorar Berkshire Hathaway
Desde Bestinver apuntan que valorar Berkshire Hathaway podría parecer una tarea complicada, pero no lo es tanto si se siguen los métodos que el propio Warren Buffett ha proporcionado a sus accionistas a lo largo de los años. Métodos que ha ido justificando con extensas explicaciones sobre la naturaleza de los negocios y la mejor forma, en su opinión, de valorarlos.
"El primer método que vamos a utilizar es muy sencillo. Consiste en valorar sus negocios no cotizados asignándoles un múltiplo razonable y sumar luego el valor de su cartera de cotizadas y la caja. Tras unos pequeños ajustes, obtendremos un valor intrínseco para Berkshire Hathaway. El segundo método que utilizaremos consiste en realizar una suma de partes, valorando individualmente la aseguradora y el resto de negocios de Berkshire. Por último, contrastaremos los resultados de ambos con un análisis más tradicional basado en el valor en libros o valor contable de Berkshire y su capacidad de generación de caja", subrayan.
En la gestora del grupo Acciona son cautos en cuanto a las previsiones de resultados de Berkshire Hathaway del año que acaba de terminar y los siguientes, sobre todo teniendo en cuenta que en el segundo trimestre de 2020 –el más severo en cuanto a impacto económico de los confinamientos- los resultados operativos de Berkshire cayeron, en conjunto, un 10%.
A cierre de septiembre de 2020, el último trimestre reportado, la caja en el balance ascendía a 143.000 millones de dólares y la deuda a 22.200 millones, un incremento de 2.300 millones frente al cierre de 2019. Berkshire genera aproximadamente 2.000-3.000 millones de flujo de caja libre (FCF) al mes, por lo que estiman una caja de 146.000 millones a final de año (habiendo recomprado en el trimestre unos 4.000 millones de sus propias acciones). Desde Bestinver proyectan unas recompras muy modestas para este año y el siguiente (3.000 millones por trimestre) de manera que, si Berkshire no realiza nuevas inversiones, el nivel de caja iría ascendiendo a un ritmo de unos 13.000 millones por ejercicio (25.000 millones de FCF – 12.000 millones de las recompras).
Para Bestinver, el valor intrínseco de Berkshire es de 300 dólares por acción casi un 30% por encima de los precios actuales.
Riesgos: Buffett y Munger son mayores
El riesgo más aparente de la inversión en Berkshire Hathaway para Bestinver es la edad que tienen tanto Warren Buffett como su socio Charlie Munger. "No hay nadie con la experiencia, la sabiduría y el historial de Buffett, por lo que su avanzada edad (90 años) es el riesgo más palpable a medio plazo. Su socio Charlie Munger (97 años), uno de los más brillantes pensadores de la historia en lo que a inversiones y filosofía de vida se refiere, tiene incluso menos tiempo por delante que el propio Buffett. Ambos son insustituibles y serán una pérdida significativa cuando dejen de dirigir la compañía", indican.
Buffett lleva telegrafiando con bastante detalle la hoja de ruta de su sucesión. Es por ello que desde Bestinver no tienen muchas dudas de quiénes serán sus sucesores, ni de que son las personas adecuadas para sus cargos.
La gestora cree que si el día que Buffett muera la acción cae de manera significativa, sin que se haya producido un cambio en la valoración, los directivos que estén al frente del conglomerado aprovecharán para comprar todas las acciones de Berkshire Hathaway que puedan, generando, con ello, un inmenso valor para sus accionistas.
Berkshire es un negocio estable, bastante inmune a la disrupción (si eso es posible en los tiempos que vivimos) y genera rentabilidades cercanas al 10%. La gran mayoría de negocios son nobles, predecibles y anti-frágiles.