“La volatilidad seguirá acompañándonos hasta que se conozca la decisión de Italia y España de pedir ayuda. Tiene que haber un reajuste de expectativas, pero todo pasa por las compras que pudiera hacer el BCE y una petición de ayuda por parte de los Estados necesitados, que es por donde pasa la clave de todo”.

“Las últimas caídas de Repsol
nos hacen ver precios atractivos en 12,10 euros, por lo que, a corto plazo, puede ser un valor a tener en cuenta”.

Declaraciones a Radio Intereconomía