Por detrás, Finlandia y el Reino Unido, con un 72 por ciento y un 71 por ciento, respectivamente, mientras que en Austria el porcentaje de hogares conectados alcanza el 69 por ciento, en Irlanda, el 63 por ciento y en Francia, el 62 por ciento.

Por encima de la media también están Malta y Eslovenia, con un 59 por ciento, Estonia y Eslovaquia, con un 58 por ciento, y Letonia, con un 53 por ciento.

España se sitúa en el lugar 17 junto a Lituania, donde el porcentaje de acceso de los hogares a Internet es también del 51 por ciento.

A la cola, Hungría y Polonia, con un 48 por ciento; Portugal y la República Checa, con un 46 por ciento; Grecia, 31 por ciento; Rumania, un 30 por ciento y Bulgaria, 25 por ciento.

En un año, la media europea de acceso a Internet subió seis puntos, del 54 por ciento al 60 por ciento.