Después de una ráfaga de ofertas públicas venta en 2018 en Estados Unidos, el próximo plan de salida a bolsa para 2019 parece aún más atractivo. Aún cuando a finales de 2018 la volatilidad regresó con ganas a Wall Street, para este 2019 se espera que un puñado de compañías multimillonarias salgan a bolsa. De hecho, la reciente volatilidad y caída de mercados introducidas nuevamente por las palabras de Trump, hace bastante improbable que evite que el año sea histórico para temas nuevos o “estrellas del firmamento” (blue chips como las llaman los americanos) preparadas para comenzar a cotizar en las principales bolsas de valores.

Entre las más esperadas están:

* Uber: principal compañía mundial de transporte de pasajeros. La compañía rellenó el file para hacerse pública a inicio de diciembre y compite con su rival Lyft (cuay OPV fue hace cerca de un mes). La valoración potencial de la OPV es de 120.000 millones de dólares.

*Airbnb: que a diferencia de las dos anteriores (Urbi y Lyft), planea listarse/cotizar directamente, vendiendo acciones directamente al público y no a los underwriters o suscriptores. La valoración aproximada es de unos 31.000 millones de dólares.

*Slack: es una las tantas startup de Silicon Valley que planea salir a bolsa este 2019, pero esta bajo el contrato asignado a Goldman Sachs. Slack es una aplicación de mensajería en el lugar de trabajo. El crecimiento de usuarios de Slack es impresionante, a mayo de 20189 daba servicio a 8 millones de usuarios diarios y 3 millones de suscriptores de pago. Sin embargo, la competencia es muy fuerte y creciente de compañías mucho más grandes como Microsoft Corp, Alphabet, Cisco Systems, etc. Su valoración se calcula sería de 10.000 millones de dólares.

*Palantir Technologies: La firma secreta de análisis de datos e inteligencia Palantir también se posiciona como una de las principales OPI de 2019. Algunos de los principales clientes de Palantir son gobiernos y agencias de inteligencia, y la compañía supuestamente desempeñó un papel importante en la captura de Osama bin Laden en 2011.  Valor estimado de 30-40 mil millones de dólares.

Es conocido que la mayoría de las OPVs (aunque hay excepciones) aumentan sustancialmente su valor en su primer día de negociación. Desde 1980 la ganancia promedio de la OPVs en su primer día de cotización ha sido del 18%, y después de ese día la rentabilidad tiende a normalizarse e incluso a disminuir derivado de la toma de beneficios por parte de los especuladores, pero aquellas con buenos fundamentales vuelven a tomar una tendencia alcista.

 

 

Pero es prácticamente imposible para un inversor particular participar en todos y cada uno de las OPVs, pero para aquellos inversores que buscan capitalizar esas atractivas rentabilidades existen algunos ETFcuyo objetivo de inversión son las OPVs, como lo son:

First Trust U.S. Equity OpportunitiesETF (FPX), con un volume de 1.100 millones de dólares y Renaissance IPO ETF (IPO)

Ambos han tenido un desempeño extraordinario en lo que va del año, pero el ETF IPO ha superado con creces la rentabilidad del FPX (35% vs 24% respectivamente), que representa casi el doble de rentabilidad que el 18% alcanzado por el ETF SPDR S&P (SPY).

Sin embargo, a un plazo más largo, el FPX supera la rentabilidad del IPO. Tomando como base el 14 de octubre de 2013 (fecha de lanzamiento del ETF IPO), la rentabilidad del FPX es de un 87% Vs el 58% de IPO.

 

 

¿A qué se debe esa diferencia de rentabilidad del IPO y del FPX?

La cartera del FPXincluye las mayores 100 OPVs recientes y compra acciones durante los siguientes 6 días de cotización, manteniendo las posiciones por aproximadamente 4 años, lo que le permite una exposición de aproximadamente el 85%de la capitalizacióndel mercado total de las OPVs en EE.UU por ese plazo.

Por su parte, la cartera del IPOtrata de capturar el 80% superior del nuevo valor de mercado de las OPVs. IPO compra acciones dentro de los 90 días tras el primer listado de las OPVs y las mantiene durante 2 años. Este ETF también tiene la capacidad de dar entrada a grandes y nuevos inversores a su cartera de una manera más ágil y rápida que FPX. Además, ese periodo de 90 días le permite sortear cualquier obstáculo o bache que pueda ocurrir en la primera semana o mes de operación de la nueva acción.

Otra diferencia importante entre ambos ETFs es que, si alguna acción es adquirida o fusionada por otra compañía más madura o antigua, FPX mantendrá las acciones de la entidad adquirente o de la nueva entidad fusionada. Eso ha dado lugar a algunos nombres inesperados en la cartera de FPX, como Verizon, Stryker, Tyson Foods, Dow, Hershey y General Hills, todas empresas que han existido durante décadas y que no han sido precisamente OPVs recientes, y que son las 10 principales posiciones de la cartera de FPX, lo que puede resultar extraño para el inversor que busca exposición a nombres más recientes del mercado.

Es por ello, que nos decantamos por el ETF de IPO que en cierta forma es más puro en cuanto a las Ofertas Públicas de Venta.