Después de este anuncio, y de que en un comunicado la institución monetaria japonesa dijera que el país ya no se encuentra en deflación tras las políticas de flexibilización cuantitativa, los mercados han respondido con subidas. En especial, los bancos han sido los que han tirado del carro con importantes revalorizaciones al calor de la reunión clave del banco central asiático.

Y es que este cambio tiene como objetivo mantener el rendimiento del bono de deuda nipona a 10 años (el cual es inversamente proporcional a los tipos a largo plazo) en torno al 0%.


A su vez, la entidad aseguró que mantendrá intacto el ritmo anual al que viene incrementando la base monetaria nipona y que implica una compra de activos anual valorada en 80 billones de yenes (700.969 millones de euros/780.924 millones de dólares).

Así pues, el súper sector bancario europeo está sumando alzas de en torno al 2%. Sin embargo, según apunta José Luis Cárpatos, analista independiente “en el planteamiento técnico a semanas tampoco varía mucho la situación porque seguimos bajo la influencia de una figura bajista en esa doble resistencia de las dos directrices que forman aquel gallardete invertido justo debajo de la directriz alcista que viene desde los mínimos de 2009”.

Las subidas son generalizadas pero “es más fuerte tanto en el sector español como en el italiano”, aunque la mala noticia del comportamiento de Deutsche Bank “sigue encima de la mesa porque cae otro -0,6% por lo que se mantiene ese foco negativo que puede asustar al resto si volviesen las ventas fuertes en el valor”.Santander o BBVA se anotan casi un 3% de subidas, mientras que el resto de la banca mediana celebra las noticias que vienen desde el país nipón.

%%%Le avisamos cuando Santander llegue a niveles clave|SAN%%%

Por el contrario, los mercados, y en especial el sector bancario, están a la espera de la decisión que pueda tomar la Reserva Federal en cuanto a los tipos de interés, que puede hacer que mañana cambie la película. Principalmente, porque el consenso de mercado no espera especiales cambios en cuanto a la política monetaria norteamericana.

En todo caso, se prevé que sea en la reunión de diciembre cuando la Fed vuelva a tocar los tipos de interés al alza. Aunque siempre cualquier comentario de algún miembro del FOMC puede alterar el devenir de las bolsas.