No es momento de deshacer posiciones a pesar de la incertidumbre política que se cierne sobre los acontecimientos que tendrán lugar en el mes de junio. Hay que controlar las emociones y ser pacientes, sobre todo si las inversiones están bien orientadas. De todos modos, todo apunta a que tendremos un verano turbulento.
Hay algo que preocupa aún más, la Reserva Federal. Es preocupante que la probable subida de tipos vuelva generar presiones sobre las divisas de los países emergentes. No podemos estar adulterando constantemente los mercados de capitales. Yo creo que en un entorno con crecimiento bajo y con unos resultados empresariales que no terminan de encandilar, sobran excusas.
Recomendación, en primer lugar, para los que ya están dentro de la renta variable que sean pacientes y que controlen las emociones. Este es el momento de estar centrado en empresas de calidad que retribuyan bien al accionista, mediante una buena política de distribución de dividendos o que recompren acciones. Esto es algo que ya hemos visto en Estados unidos. Este tipo de empresas son muy interesante para estar.
El que no esté en renta variable y quiera incrementar su exposición, que no se preocupe, porque como el verano va a ser calentito, espero una corrección en los próximos meses que allane el camino para entrar en Renta Variable en un futuro.
Declaraciones a Radio Intereconomía
