Esta semana el foco de la atención está puesto en la primera vuelta de las elecciones de Francia. ¿Es momento de mantenerse al margen de la renta variable hasta que se conozca el resultado o lo peor ya está descontado?

Es momento de ser algo prudente a la hora de invertir en renta variable, no solo por la subida que hemos tenido en el primer trimestre del ejercicio, sino también por el último tramo del 2016. Ahora mismo el mercado, sobre todo los mercados de acciones están muy focalizados en tres temas en el rabioso corto plazo. Primero, qué va a ocurrir en Francia por lo que era hace unas semanas va cambiando, sobre todo porque se estima que el nivel de participación va a ser muy alto, cercano al 75% las últimas encuestas que he llegado a ver. Eso sí que está creando cierta incertidumbre. Lo que parecía claro que si había una segunda vuelta Le Pen, en caso de quedar como una de las posibles candidatas para la segunda vuelta sería quizás la derrotada, ahora no queda tan claro porque puede presentarse una segunda vuelta con dos extremos. Con dos extremos que no son muy pro Unión Europea. Con mucho intervencionismo. Y eso puede generar tensiones que en estos momentos los mercados de capitales lo que estamos asistiendo a las correcciones son muy lógicas, pero creo que no es el escenario catastrofista que sería el que se podría plantear entre malo a peor si se diera una segunda vuelta con esos dos candidatos.

El segundo foco de atención lo tenemos en los resultados de las empresas de Estados Unidos. Creo que es muy importante. La geopolítica es muy vital, muy relevante, pero también lo es a nivel financiero y lo que ocurre a nivel económico. Con lo cual, un segundo tema del que hay que estar muy pendiente son los resultados de las compañías norteamericanas.

Y en tercer lugar cuál es la salud de la economía de Estaos Unidos. Hemos visto como la Reserva Federal de Philadelphia ha revisado una estimación a la baja en cuanto al crecimiento de Estados Unidos, con lo cual eso también un poco ha metido un cierto ruido hacia si hay un cierto parón hacia el crecimiento económico norteamericano. Por tanto, son esas tres variables, pero esas tres variables lo único que tiene que hacer es pensar cómo estar ahora mismo en exposición a renta variable. Creo que lo que invita ahora mismo es prudencia, paciencia, y flexibilidad. Prudencia en cuanto a la exposición a renta variable, creo que tener una exposición neutral a bolsa está bastante bien. No sobreponderar de momento. Paciencia si estamos en los sitios adecuados y paciencia porque creo que va a haber momento porque el fondo de mercado sigue siendo positivo. Va a haber momento de incrementar la exposición a renta variable. Nos sigue gustando mucho la bolsa española. Nos gusta mucho la bolsa francesa. Creo que viene muy de tapado y va a sorprendernos. Si no hay una catástrofe. Francia empiecen a tenerla en el radar porque puede sorprender. Y en tercer lugar la renta variable de los mercados emergentes. Luego flexibilidad, porque una cierta dosis de tener productos de gestión activa, aunque hay alguno que ha sorprendido por ser demasiado amarrategui y que entonces habrá que revisar por si acaso hay que cambiarlo o reducirlo en favor de otros productos, pero creo que va a haber momento de oportunidad. Estas correcciones no es un cambio de ciclo, sino más bien para aprovecharlo para incrementar la exposición a bolsa. Lo que ocurra en Francia salvo que sea el cisne negro, sí que habría que replantearse sin duda alguna toda la estrategia.  

Por otra parte, comienza ya la temporada de resultados de las cotizadas. ¿Qué espera de esta campaña? ¿Se puede apostar por fondos para aprovecharse de la presentación de resultados?

Lo que hemos visto ha sido una subida muy fuerte de la renta variable, puesto que se estimaba un escenario económico muy distinto del que se está en estos instantes hablando o lo que está descontando el mercado. Me refiero a que una de las variables que estaba en juego era una reflación un inflation trade. Es decir, que se generara inflación como consecuencia de las políticas monetarias expansivas y ahora apoyadas por una esperanza de unas políticas fiscales expansivas que tardan en llegar y todavía no se están produciendo. Trump está haciendo todo lo contrario a lo que dijo. Esas subidas lo que han supuesto han sido múltiplos muy exigentes. Las betas son caras y se han puesto mucho más caras. Por tanto, o hay una mejora de los resultados de las empresas o hay índices que pueden sufrir. De hecho puede que sea lo que estemos asistiendo en estos instantes. Puede haber una mejora de ingresos, pero menos buenos de los esperados o de los que justifiquen valoraciones muy exigentes. ¿Eso significa que no hay que estar en renta variable? No. Lo que hay que hay que estar es en buscadores de Alpha. Más que buscadores de Beta, hay que estar en buscadores de Alpha, y en empresas que sí que vean mejorar sus resultados, sus beneficios y en ese sentido que en estos instantes todavía puedan cotizar con ciertos márgenes de seguridad. Algunas ideas son True Value como fondo global, Valentum, Sinergy smaller companies. También en emergentes podemos encontrar valor en grandes empresas y en pequeñas y medianas compañías. Pero creo que estas ideas son interesantes sobre todo en la campaña de resultados que vamos a ir conociendo porque algunos van a estar muy en línea de lo esperado, pero es que el mercado ha descontado una expectativa mucho mejor de lo que realmente puede ocurrir, puede haber una cierta decepción. Hay que estar muy atentos a los fondos que son generadores de alpha.

Además el sector bancario sigue en el foco de la actualidad. Con todo lo que está pasando con Popular o las dudas que aún hay con respecto a la banca italiana, ¿es mejor permanecer al margen de fondos con exposición a bancos?

Creo que el sector bancarios sí, pero con prudencia. Quizá una posición muy táctica. Es decir, a nivel táctico nos siguen pareciendo algunos bancos interesantes, como visión estratégica nos gustan quizá otras temáticas. Creo que hay otras temáticas que pueden pasar por el envejecimiento de la población, nos gusta y seguimos apostando por él. Todo lo que es seguridad y ciberseguridad nos gusta. El sector del agua, el sector de la tecnología. Lo vemos como temáticas que quizá han corrido a corto plazo mucho y que de forma táctica quizá puedan volver a sufrir, pero le vemos más visibilidad a largo plazo. Este es el gran problema la banca. La mochila que tiene el sector bancario en estos instantes puede ser los márgenes de ingresos. Va muy relacionado con la competencia. Por ejemplo hemos visto como el número de competidores a nivel de bancos tradicionales se ha ido reduciendo, pero pueden aparecer nuevos competidores. ¿Se imaginan a Google siendo un banco? ¿O Facebook? Eso sería tremendo para la banca y no sería descabellado, aunque seguramente los reguladores les exigirán mucha normativa sobre todo por eso de la nube. Pero, ojo, porque pueden aparecer nuevos competidores. Ya hay competidores en la Fintech que evidentemente le van a restar potencial de crecimiento  a muchos bancos tradicionales. Los medios de pago tradicionales se ven compensados con otros medios de pago donde muchos bancos han estado rezagados. Pasa como con el caso de Nokia frente a Apple, que llegó un poco tarde. Con lo cual en ese sentido la banca tiene ciertos problemas. Uno es clarísimo, volvemos a lo que comentábamos antes. Se ha estimado que los tipos de interés van a subir y el mercado que mejor valoración tenía se ha quedado muy por detrás en el sector bancario. Pero claro, con la curva de tipos de interés positiva, subiendo los tipos de interés del medio y largo plazo, eso era muy interesante para la banca. Lo que ocurre ahora es que estamos viendo los tipos de interés al contrario. Se están relajando. Porque las expectativas inflacionistas no terminan de llegar. Luego tengo mis dudas de que el BCE relaje su política. Creo que Europa tiene un fregado y un carajal montado que creo que el BCE lo que menos quiere es meter ruido adicional. Yo veo a los bancos centrales de verdad siendo hoy por hoy uno de los factores por los cuales vemos el sentimiento y el fondo de mercado positivo. Por tanto, los bancos centrales dicen que van a subir los tipos, pero quizá vayan a subir menos de lo esperado y el BCE puede mover ficha pero salvo que haya una explosión de la economía macro, puede actuar pero ya más adelante. Y más adelante significaría 2018 y esto para la banca no juega a favor. A determinadas bancas sí, porque a favor de determinadas bancas estamos viendo un boom en el crecimiento del crédito, los movimientos corporativos, con lo cual existen bancos o compañías de seguros que podrían ser interesantes todavía. Por eso digo: táctica sí, pero estratégicamente veo otros sectores con mayor visibilidad. En estos instantes podemos tener algún fondo de inversión que tenga sector bancario dentro, pero sí tener algo de sector bancario. Pero como digo hay otras temáticas que veo más interesantes.

También quería hablar de mercados emergentes. ¿Lo ve como un foco de oportunidades este año con el entorno global en el que nos encontramos?

Sin duda alguna sí. Y lo estamos viendo. Está funcionando fenomenal. Nos ha pegado algún susto el tema de la India con algunos temas de política monetaria. Pero creo que sigue habiendo factores muy positivos para la renta variable emergente e incluso para deuda emergente. Si es por valoraciones. Las valoraciones, los fundamentales, son más atractivos si los comparamos con Europa y también si los comparamos con Estados Unidos que por valoraciones son los más caros. Con lo cual, en el conjunto de las bolsas emergentes las valoraciones son atractivas de forma relativa a otras bolsas del mundo y también de forma relativa con respecto a su media histórica. Con lo cual eso les hace atractivo. Luego crecimiento económico. Estamos asistiendo a si hay dudas en cuanto a techo o no techo en el crecimiento de la economía de Estados Unidos, pero lo que sí que está claro es que la expectativa de crecimiento de la economía mundial es positiva. Además es uno de los momentos históricos donde además está muy coordinada. Todos están creciendo y basta con ver los PMI manufactureros o no manufactureros a nivel del conjunto mundial. Estamos viendo como están todos en el territorio ahora mismo expansionista. El tercer factor y muy importante si a Donald Trump no le gusta un dólar fuerte y no se aprecia excesivamente y no tenemos a los tipos de interés del 10 años en Estados Unidos muy cerca del 2,70% o del 3%, esto no es nada malo para la inversión de los mercados emergentes. Cuando hablamos de tipos de interés muy altos o dólar con la posibilidad de estar más fuerte, el endeudamiento de algunas economías emergentes entraba en peligro. Este miedo o este foco de tensión se alejan. Con lo cual las bolsas emergentes invirtiendo bien, con buenos gestores, a mí me gustan. Es verdad que a China le está costando este cambio de modelo económico del sector secundario y sector primario. Pero lo más importante es que está creciendo con mucho endeudamiento. Eso creo que es una espada de Damocles que hay que estar vigilando muy de cerca. Hoy por hoy para nosotros el mercado emergente nos sigue gustando con la bolsa europea.