Con base en las estimaciones del FMI, con el PIB del mundo repuntado a un crecimiento del 5,2% en 2021, viniendo de unas contracciones muy acusadas, como la sufrida en la Eurozona.  Todo apunta a una recuperación del PIB en “V”, pero ¿y los mercados? Se dice que la recuperación sectorial será de V, U o K.

Considerando un entorno de tipos de interés ultrabajos y sin cambios hasta bien entrada la fase de recuperación, los inversores tienen que seguir optando por activos con mayor riesgo, y en concreto la renta variable. Si bien, fueron las compañías de alto crecimiento las que lideraron las alzas en 2020, es de esperar que la recuperación sea más amplia en más sectores.

Según muestra el informe de la gestora, los principales sectores se movieron en direcciones muy diferentes y hay algunos que se vieron favorecidos y otros afectados por el Covid. Entre los desfavorecidos están el de viajes y servicios alimentarios que tienen demanda acumulada, pero también aquellos afectados por un temor a una fuerte recesión como energía y comercio minorista. Pero también hay otros que gozaron de una fuerte aceleración del negocio como la tecnología, sanidad, consumo básico y bricolaje o artículos para el hogar por el teletrabajo.

El sector sanitario ha experimentado una etapa muy interesante, apoyada por los avances en la tecnología médica que favorecen la reducción de costes y la generación de oportunidades para diversas empresas. Ha habido un aumentosignificativode lademanda de citas médicas en línea, pero las previsiones son aún más abrumadoras. Si bien en 2019 el volumen del mercado global de telemedicina era de 46.000 millones de dólares, para 2026 se espera que sea de 176.000 millones de dólares, es decir un crecimiento anual del 21%. Según comenta el gestor Wolf, entre las compañías que podrían cubrir el aumento de la demanda en el control sanitario a distancia destacan DexCom, ResMed, Insulet, Tandem, iRhythm y Abbot.

La energía renovable ha sido y será otro de los sectores ganadores. Las entidades gubernamentales, colegios, hogares e instituciones están invirtiendo en energía verde. Pero aún se encuentran en las primeras etapas del proceso de transición. Hacen falta mayores incentivos por parte de los gobiernos. No obstante, en Europa la transición es más pronunciada, principalmente en Alemania, Dinamarca e Italia, donde sus gobiernos han establecido elevados objetivos de descarbonización y han creado incentivos para nuevas inversiones, no sólo en redes e infraestructura, sino en almacenamiento. Basta ver como las compañías europeas han alcanzado un punto de inflexión en la capacidad de energía renovable:

Otro de los gestores de renta variable, Saligman, confía que la demande en el sector de viajes  (vuelos e incluso de cruceros) se recupere, y aunque no se sabe con que rapidez lo harán, muchos inversores han comenzado a tomar posiciones en algunas de estas empresas. En China, el transporte aéreo nacional ha aumentado y se podría esperar que pasara lo mismo en otros lados.

Pero sin lugar a duda, el sector de tecnología/digital seguirá dando titulares. La brecha digital seguirá siendo un tema para sortear por las compañías sobrevivientes. Aquellas con una ventaja digital, con modelo de negocio en línea, rápidos y eficientes se desmarcarán de sus competidores. Abarca a un gran número de sectores como fitness, educación, publicidad, ocio, comercio minorista, procesamiento de pagos y otros más. Pero hay sectores en los que la digitalización no puede competir, como en los procesos tradicionales de fabricación. Según apunta Buchbinder, gestor de renta variable, es posible que las tasas de crecimiento se ralenticen, pero difícilmente se cancelarán suscripciones.

Incluso el nuevo primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, convierte a la digitalización en una prioridad en su proyecto de reforma. Al inicio de la pandemia, la proporción de japoneses que trabajaban desde casa se situaba muy por debajo de otros países desarrollados, con la penetración de los servicios en la nube muy reducida debido a sus complejos sistemas tecnológicos, poco estandarizados y muy manuales. Pero el interés del gobierno abre la puerta a una amplia gama de oportunidades.