Para la empresa presidida por Antonio Brufau la propuesta fue absolutamente insuficiente. La compañía española se opone de manera radical al ofrecimiento de YPF, que consistía en la creación de una sociedad en la que Repsol tendría una participación del 47% del total, mientras que YPF poseería el 51% y Pemex el 2%. 

Según estas informaciones, el pasado 26 de junio el Consejo de Administración de la petrolera española rechazó de lleno la propuesta al considerarla insuficiente. Sin embargo, la compañía mexicana cree que con las ganancias de la explotación de esa parcela de Vaca Muerta se amortizarían las pérdidas tras la expropiación. Tanto es así que ha encargado auditorías a
DeGolger & McNaugton, especializada en la valoración de reservas petrolíferas, para conocer de primera mano cuál es el valor real del yacimiento de Neuquén y así convencer a Repsol.

Los expertos de DeGolyer & McNaugton tan sólo tienen el encargo de hacer una auditoría para saber el valor auténtico de Vaca Muerta. En el momento en el que YPF realizó la propuesta a la empresa española, la cifraron en en 44.000 dólares por unidad de acre. Esos números, por el contrario, fueron absolutamente insuficientes para la compañía española porque, además, los consideraron un tanto exagerados.

Ante esta situación, Pemex avisó a Repsol (es su tercer accionista con un 9,37% de participación) el pasado 2 de julio que podría marcharse de su accionariado en el caso de que no se llegue a una solución que les satisfaga. No obstante, la petrolífera mexicana, ante la negativa española, perdería el 2% del 6,4% que ofreció YPF a Repsol.

Por otro lado, el Tribunal del Ciadi (Centro Internacional de Arreglos sobre Disputas en Inversiones) llevará la primera audiencia para resolver el reclamo de Repsol tras la expropiación de YPF. La compañía española valora esta participación en 10.500 millones de euros, según el diario BAE argentino.