La compañía ha aclarado a los inversores que la tendencia del sector de fabricar cada vez más teléfonos más asequibles ha tirado a la baja el precio de los chips y, en consecuencia, sus ingresos.
Las ventas de la compañía hasta el trimestre que acaba en diciembre diciembre se moverán en un rango de precios que va desde los 6.300 y los 6.900 millones de dólares.
El consenso de analistas había calculado unos ingresos en ese periodo de 7.100 millones de dólares.
El beneficio por acción sin tener en cuenta extraordinarios estará comprendido entre los 1,1 y los 1,20 dólares por acción.
Hace unas semanas, la empresa publicó un aumento del beneficio de su cuarto trimestre fiscal del 18% y un incremento de las ventas del 33%. (Acceder al comunicado)
Hasta ayer, la subida de las acciones del fabricante de chips para móviles estaban por debajo de la media del mercado, con un avance de algo más de un 10%.
Qualcomm, al igual que sucede con otras compañías del sector, está intentando ampliar su cuota de mercado en el negocio de las tablets.
Desde un punto de vista técnico, los Indicadores Premium, muestran que la empresa se encuentra en una fase alcista. La compañía tenía 9 puntos en una escala que va del 0 al 10.
Quizá el único indicador negativo en el aspecto técnico de Qualcomm (al cierre de ayer) es el volumen a medio plazo. Según estas señales, es decreciente. Sin embargo, tanto la volatilidad, como la tendencia a cualquier plazo, son positivas para el valor.
