Sigue siendo uno de los mejores valores del Continuo en el presente ejercicio a cuenta de todas las especulaciones sobre el rescate público, que al final se ha producido. Y a pesar de la corrección que le ha bajado de los máximos del año, tras confirmarse la noticia. La empresa conseguía que la SEPI entrara en su Consejo y en su accionariado y se encargará durante un periodo temporal, de elegir también, tanto quien lleve los designios de la compañía, su CEO, como de quien sea su próximo socio industrial y por ende, que apoye a la empresa en su futura andadura.
No lo ha tenido fácil, ni lo tiene ahora tampoco Duro Felguera que ha conseguido este apoyo tras una leonina renegociación de su deuda con los bancos y una más que difícil situación financiera, en especial de liquidez, para emprender nuevos proyectos y mantener vivos los que ya tiene, fábricas incluidas.
A pesar de todo ello, los inversores lo han tenido cristalino desde el comienzo de la crisis: apoyo total que comenzaba hace un año y que no ha parado desde entonces. En lo peor de la pandemia, el 19 de marzo pasado, cerraba a 0,203 euros por acción, con lo que la revalorización en el mercado continuo supera con creces el 445% hasta los 1,08 euros por acción en los que cerraba ayer. Eso supone que en lo que llevamos de año Duro Felguera sube en el Mercado Continuo un 74,8%
Tampoco estaba entre los agraciados con la etiqueta de sector esencial Berkeley Energía durante la pandemia. En realidad casi ni estaba. Sólo con trabajos previos y más de 192 autorizaciones parciales se presentaba ante los inversores la compañía australiana con la intención de levantar el proyecto de abrir la mina de uranio a cielo abierto más grande de Europa en Retortillo, Salamanca. Y en esas está desde entonces.
Ahora se mantiene en compás de espera, aunque con las espadas en alto porque la Ley de Cambio Climático puede acabar con sus esperanzas o abrir camino definitivo hacia la construcción de la mina. Todas sus idas y venidas se han cotizado en el mercado y buena parte del pasado ejercicio se convirtió en el valor especulativo por excelencia en el Mercado Continuo español... hasta que llegó Urbas en septiembre, pero eso lo contaremos después.
Fue de tal magnitud el nivel de las subidas, que incluso en un hecho relevante a la CNMV, Berkeley tuvo que indicar que no sabía por qué estaba subiendo tanto el valor en un momento determinado, tal y como también ocurrió en el otro mercado en el que cotiza, el australiano, al que pertenece la empresa. Desde hace justo un año, el valor recupera más de un 400%, desde los niveles de 0,092 euros en los que cotizaba hasta los 0,401 euros en los que cerraba ayer. También se mantiene en positivo en el presente ejercicio, con alzas que rozan el 10% desde que comenzara el presente ejercicio bursátil.
El tercer valor, como anticipaba, tomó el relevo de Berkeley en el ánimo especulativo de los inversores. Quizá además el caso más paradójico de todos, ya que hablamos de una inmobiliaria, que sea por sus novedades o por el interés de los inversores en colocar su dinero, se benefició de ese ánimo en el último año. Primero, en marzo compraba la constructora vasca Murias, que fue el principio de su saber hacer en 2020. Y así fue transcurriendo el año.
Pero al llegar septiembre saltaba la noticia bomba. De la mano de su nueva constructora adquirida daba el salto a la minería con la adquisición de una mina de feldespato en Galicia, en Silán en Lugo en concreto, un mineral muy codiciado, e importado, para hacer azulejos. Y ésta se convertía en una mina de oro para el valor, que se retroalimentaba día tras día con la compra en el mercado de sus acciones por parte de los inversores.
Compras que se siguieron sucediendo cuando Urbas anunció una nueva adquisición, en este caso otra constructora, la alicantina Ecisa en la que entraba además en juego el intercambio accionarial con el grupo empresarial qatarí Alfia.
Ahora mira a su diversificación internacional con dos proyectos de gran calado en ciernes, uno en Dubai y otro en Cuba que son su futuro a medio y largo plazo, tal y como ha presentado la compañía. Pero si mira hacia atrás, a marzo del pasado año, comprobará como desde los niveles de 0,004 euros por acción hasta los 0,019 euros en los que cerraba ayer avanza un 400%. Nada menos. También sube en el presente ejercicio, eso sí, con más moderación ya que presenta avances del 7,9%
