El banco presidido por Emilio Botín lleva siendo el protagonista en el parqué del selectivo desde el martes de la semana pasada por una serie de operaciones convenidas en que se ha llegado a mover el 2,46% del capital del banco en operaciones denominadas como 'lavado de cupón'.Este tipo de operación tiene por objetivo que el inversor español no pague la tributación del 25% a Hacienda que establece la ley española, pero que no existe en otros países extranjeros. Exactamente, este movimiento consiste en la venta de un valor a un no residente los días anteriores a la fecha de pago del dividendo, pero con un pacto de recompra a un precio convenido días después de haberse hecho efectivo el mismo. La pasada semana, varios analistas achacaban esta serie de movimientos a "grandes inversores", pero hoy fuentes del mercado han confirmado a Europa Press que estas operaciones, que han supuesto la circulación de más de 2.060 millones de euros, se debe a este tipo de "subterfugio legal".