Barclays ha elevado el precio objetivo de los títulos bursátiles de Sacyr, la constructora del Ibex 35, desde los 4,10 euros anteriores a los actuales 4,20 euros, otorgándole así un potencial del 41%. Esta revisión al alza ha generado un impacto positivo en la cotización de la empresa en la bolsa española.

Al cierre del viernes pasado, las acciones de Sacyr se situaban en 2,98 euros por acción, pero tras la apertura de la jornada de hoy, lunes, han experimentado un ascenso del 3%, alcanzando los 3,07 euros intradía.

La recomendación positiva de Barclays se basa en los sólidos resultados presentados por Sacyr correspondientes al año 2023. Durante este período, la compañía llevó a cabo un giro estratégico hacia la gestión de infraestructuras P3, desprendiéndose de sus dos principales unidades de servicios, Valoriza Servicios Medioambientales y Sacyr Facilities. Este movimiento ha sido destacado como clave en la nota de prensa emitida por la constructora.

En términos financieros, el beneficio neto de Sacyr alcanzó los 153 millones de euros en 2023, registrando un impresionante aumento del 39% en comparación con los 111 millones de euros obtenidos en 2022. A pesar de una ligera disminución del 7,4% en la facturación, que se situó en 4,6 millones de euros, la empresa ha demostrado un sólido desempeño en varias magnitudes clave.

El EBITDA experimentó un crecimiento del 7%, llegando a los 1.500 millones de euros, y el margen EBITDA aumentó en 430 puntos básicos, alcanzando un récord del 33%. Los activos P3 ahora representan el 93% del EBITDA del grupo.

Uno de los logros más destacados del ejercicio fue la drástica reducción de la deuda neta con recurso, que disminuyó un 51%, pasando de 546 millones de euros en diciembre de 2022 a 269 millones de euros a finales de 2023. El ratio de deuda neta con recurso sobre EBITDA con recurso, junto con el ratio de distribución de activos P3, se sitúa en 0,8 veces.

Como parte del Plan Estratégico 2021-2025, Sacyr aumentó la retribución al accionista en 2023, distribuyendo 13,6 céntimos por acción en dos dividendos flexibles en enero y julio. Esto elevó el rendimiento anual al 4,9%, consolidando la retribución al accionista como uno de los pilares fundamentales de la estrategia de la empresa.