El 14 de abril, tanto Repsol como Caixabank vivieron, respectivamente, dos buenas sesiones bursátiles. Sin embargo, lo cierto es que ya se despertaron con malas noticias. La imputación de los que fueran presidentes de ambas empresas en 2011: Antonio Brufau, que todavía ostenta el cargo en la petrolera e Isidre Faine, entonces presidente del banco.
En los dos casos el magistrado de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón imputaba a los dos por un presunto delito de cohecho en el denominado caso Tandem. Se trata de una pieza separada, la numero 21, en la que se investiga el supuesto encargo por parte de las dos compañías al excomisario Villarejo para que presuntamente espiara en 2011 al entonces presidente de Sacyr, Luis del Rivero.
La idea en resumen era evitar que del Rivero se hiciese con el control efectivo de Repsol, mediante el acuerdo con la petrolera Pemex, para alcanzar un tercio del total de sus acciones. El papel de La Caixa en todo este asunto viene dado por su presencia accionarial, del 12,9% en la petrolera.
A partir de aquí analizamos el efecto en la cotización de las dos empresas. Con fechas clave. La primera el 15 de abril, cuando se imputó a los entonces presidentes. Ese día, como comentábamos al principio los dos valores cayeron en el mercado: Repsol un 1,63% y CaixaBank un 2,05%. Efecto inmediato. De esos niveles a los actuales, vemos un ascenso en ambos casos: del 2,6% en la energética y del 2% para la entidad financiera.
La segunda fecha clave pasa por el 7 de mayo, día en el que, finalmente tras algún retraso, declararon Brufau y Fainé en la Audiencia Nacional como implicados. Ambos han admitido que acordaron investigar a Sacyr, pero rechazan que para ello contrataran a Villarejo. Ese día las acciones de Repsol apenas se movieron y las de CaixaBank ganaron un 0,93%. En ambos casos, con cotizaciones superiores a su precio actual. Repsol cotizaba un 6% por encima y CaixaBank un 4% también superando sus niveles actuales.
La última y más reciente, nos lleva a mirar al 8 de julio: día en el que la imputación se amplía a las empresas: Repsol y CaixaBank. Personas jurídicas, por tanto, investigadas por esa presunta contratación por delitos de cohecho y revelación de secretos. Ese día de nuevos sus valores cayeron en el mercado, un 2,25% la compañía energética y un 1,78% el banco. Sus niveles, inferiores a los de ahora: un 3,5% más para CaixaBank y un 1,3% para Repsol.
En definitiva, desde que comenzaran las imputaciones, que recordemos también se dirigen a otros miembros de ambas empresas, Repsol cae un 4% mientras que apenas se aprecia variación e iguala cotización en el caso de CaixaBank.
Pero sí es cierto que esto, judicialmente hablando, solo acaba de empezar. Repsol ya ha señalado que contraatacará. En un comunicado a la CNMV ha destacado que colaborará con la justicia sin restricción alguna, mientras que señala que su condición de investigada “no tiene consecuencia alguna sobre la sociedad, su gobernanza o actividad”.
Y avisa de que adoptara “cuantas actuaciones sean necesarias en el ámbito del procedimiento en el que se le investiga, colaborando su restricción alguna con la justicia en el esclarecimiento de los hechos”. También para exigir las responsabilidades que puedan corresponder a quienes fallaran en las funciones de vigilancia y supervisión.
Los expertos destacan que uno de los efectos puede ser el daño reputacional para ambas compañías. El último en hacerlo, antes de la imputación de las empresas, el presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura que ha advertido “del riesgo y el desgaste” en este ámbito para directivos y empresas. Y no solo eso, sino que señala que puede además existir “un riesgo diferido para el conjunto de las cotizadas”, sobre todo de cara a los inversores institucionales y foráneos.
Aunque a la hora de plantear responsabilidades, señala que deben ser los consejos de administración de cada empresa, ante las imputaciones de directivos, los que valoren cada situación en particular que se presente.
En lo que va de año Repsol gana en el mercado casi un 23% aunque cede en las últimas 20 sesiones un 11,8% de su precio en el Ibex. Mientras, CaixaBank gana de forma similar en términos anuales, un 22,75%, mientras que cede en las últimas 20 sesiones para el valor un 8,9%. Ambas baten con diferencia al Ibex, que gana desde comienzos de año un 8,7% y ocupan los puestos 9º para Repsol y 11º para CaixaBank.