El secretario de Estado reiteró que la deflación es una caída persistente y generalizada de los precios y añadió que lo que se observa actualmente es un descenso acusado del componente energético.

En este sentido, señaló que, si continúan los actuales precios del petróleo, cabe esperar que la tendencia de la desaceleración de la inflación se mantenga en los próximos meses y que posteriormente en la última parte del año se abandonen esos datos negativos.


Vegara también subrayó la importancia de que el diferencial de inflación con la media de la zona del euro se ha situado en el -0,7 por ciento, "lo que contrasta con los diferenciales positivos que se venían observando casi de forma sistemática desde la constitución del euro".

Además, afirmó que es una buena noticia la moderación de los precios en el sector servicios, cuya contribución a la desaceleración en términos interanuales fue de 1,9 décimas.

En su opinión, este comportamiento en marzo no sólo tiene que ver con un tema estacional, por ser la Semana Santa ese mes el pasado año, sino también con una menor presión de la demanda por la situación económica, lo que prueba, según Vegara, que el mercado está respondiendo.

Sobre la inflación subyacente -que excluye los elementos más volátiles como alimentación o energía-, y que registró un incremento de cuatro décimas en marzo, indicó que no cree que las previsiones de los diferentes analistas auguren una tasa negativa, ya que, a su juicio, "esta evolución dará la dará la vuelta en cuanto los efectos base de las materias primas vayan desapareciendo".